La Residencia Joaquim Blume de Esplugues de Llobregat (Barcelona) acogerá una cincuentena de los rescatados en el Mediterráneo por el buque de Open Arms, y se habilitará temporalmente durante el verano para acoger también a migrantes procedentes de la frontera sur e incluso menores no acompañados, según ha explicado el secretario de Igualtat, Migracions i Ciutadania de la Generalitat, Oriol Amorós, en una atención a los medios. El barco llegará mañana al puerto de Barcelona.
Ha afirmado que el equipamiento de Esplugues ―gestionado por la Generalitat y con disponibilidad para 140 plazas― acogerá a los 50 hombres que viajan en la embarcación de Proactiva Open Arms ―cuya llegada prevista a Barcelona es la mañana de este miércoles―, las cinco mujeres se quedarán en uno de Barcelona y los cinco menores, tres no acompañados, serán atendidos por la Direcció general d'Atenció d'Infància i l'Adolescència.
El conseller de Treball, Afers Socials i Famílies, Chakir el Homrani, aseguró que el Govern está "preparado" para acoger a los rescatados.
Un rescate de la ONG Proactiva Open Arms en el Mediterráneo / ACN
Amorós ha dicho que se ha buscado "la mejor solución" para cada perfil y que se ha optado por abrir la residencia para deportistas, en la cual, además de los migrantes del buque Open Arms, acogerá personas con una situación social que haga necesaria la misma intervención.
Ha recordado que Europa pasa por una triple crisis migratoria, con migrantes procedentes de la frontera sur, asilo y situación de menores, pero ha remarcado que no es un problema para una población de 7,5 millones y que la dificultad se encuentra en la vulnerabilidad no en la cantidad, y ha subrayado que abrir este equipamiento permitirá "aliviar la tensión e incrementar la capacidad de respuesta".
El secretario ha remarcado que la residencia de Esplugues es eventual para el verano, pero ha dicho que se está trabajando en un equipamiento "permanente" de primer acogimiento, del cual no ha querido dar más detalles.
La protección internacional de asilo
Amorós ha afirmado que el permiso de 45 días permite trabajar sus posibilidades jurídicas y si pueden acogerse a la protección internacional de asilo: "Lo que no prevemos en ningún caso son devoluciones", ha señalado.
El teniente de alcalde de Barcelona Jaume Asens ha remarcado la colaboración entre administraciones, y ha subrayado que es una oportunidad para reivindicar la capital catalana como "puerto seguro en defensa de la vida y en contraste con las políticas de la muerte de (Matteo) Salvini".
La crisis humanitaria de los refugiados
Asens ha celebrado la colaboración de Esplugues y ha hecho un llamamiento a más poblaciones catalanas, ha alabado que la Residencia Blume se abrirá no sólo para los rescatados por Proactiva Open Arms, y ha recordado que en las últimas semanas Barcelona ha acogido a unas 500 personas rescatadas del Mediterráneo.
El coordinador de Cruz Roja en Catalunya ―que se encargará del operativo de llegada―, Enric Morist, ha afirmado que se les proporcionará un primer acogimiento humanitario y social básico con comida, ropa y primera atención, y que el permiso de 45 días les permitirá trabajar con ellos con tranquilidad.
Las peticiones de protección internacional
"No es nada diferente a un operativo de Cruz Roja de cada día. Es lo que hacemos cada día en las costas", ha recordado Morist, quien ha remarcado que es una crisis humanitaria global y estructural con población en extrema vulnerabilidad que no acabará mañana.
Ha afirmado que la primera atención básica para atención especial a menores no acompañados, personas enfermas ―"no se ha detectado ningún problema grave sanitario comunitario", ha añadido― y mujeres, y que les ofrecen asesoramiento jurídico para que puedan pedir protección internacional.