El rescate de Julen, el pequeño de dos años que cayó en un pozo hace ocho días en Totalán (Málaga) avanzan con dificultad. No se espera llegar hasta donde se encuentra el niño hasta mañana martes. Los equipos de rescate que trabajan en la construcción de un túnel paralelo al pozo donde cayó Julen han logrado perforar 52 de los 60 metros necesarios dado que las máquinas siguen encontrando material muy duro para oradar.
Los estratos y roca de extrema dureza que están encontrando los técnicos en Totalán vuelven a provocar retrasos sobre el plan previsto, en el octavo día de trabajos, ya que inicialmente se esperaba poder terminar la perforación vertical durante esta madrugada y, cuando empezava a amanecer, aún faltaban ocho metros para concluir el túnel.
El operativo continúa la labor, por turnos, y con maquinaria pesada para finalizar los ocho metros que faltan para alcanzar el fondo del sondeo vertical.
A partir de ahí, será necesario entubar este conducto para protegerlo, operación que podría durar entre cinco y seis horas, a fin de que puedan descender en una jaula los mineros de la Brigada de Salvamento de Hunosa desplazados desde Asturias para continuar, a mano, un túnel en horizontal y acceder a la zona donde se cree que puede estar el pequeño desde el pasado 13 de enero.
Según el coordinador del equipo, Ángel García, delegado del Colegio de Ingenieros de Caminos de Málaga, habrá que efectuar un relleno de tierra para asegurar el descenso de estos especialistas, lo que llevará otras dos o tres horas.
Si se cumplen estos plazos, los mineros podrían empezar a excavar manualmente la galería horizontal que debe conectar el túnel con el estrecho pozo donde cayó el niño de dos años.
La velocidad de su trabajo dependerá del material que se vayan encontrando, pero por la experiencia en trabajos parecidos, los técnicos han anunciado que esta labor podría prolongarse hasta 24 horas.