El castillo monasterio de Sant Miquel d'Escornalbou (Riudecanyes, Baix Camp) vuelve a estar abierto después de las obras de restauración y mejoras de servicios que durante tres años lo han mantenido cerrado. Los trabajos forman parte de la operación 'Escornalbou reneix', proyecto que empezó hace seis años por impulsar este recurso patrimonial y natural, de titularidad de la Diputación de Tarragona y la Generalitat. Hasta el momento se ha invertido 5,7 millones de euros. El objetivo es convertir el edificio en un activo turístico "de primer orden" para los municipios de la Baronía de Escornalbou (l'Argentera, Colldejou, Duesaigües, Riudecanyes y Vilanova d'Escornalbou, los cinco en el Baix Camp, y Pradell de la Teixeta y la Torre de Fontaubella, en el Priorat) y para toda la Costa Dorada.

En esta segunda fase de restauración del monumento, los trabajos se han centrado en la iglesia y las torres, así como en el resto del conjunto monumental y su entorno. En la iglesia se ha trabajado en la restauración de la cubierta y en la consolidación estructural y restauración de los muros, así como en la bóveda bajo la cubierta y las torres. Con respecto al resto del conjunto patrimonial, se ha llevado a cabo la consolidación estructural de la planta noble y las cubiertas, se ha mejorado la accesibilidad y la conectividad, se ha creado una oficina de gestión y un espacio de acogida de visitantes y se han efectuado las pertinentes excavaciones arqueológicas.

También se ha actuado en el exterior del equipamiento con la restauración de la ermita de las Tres Verges y la ermita de Santa Bàrbara, la rehabilitación del edificio de servicios y la cafetería y la renovación del espacio de aparcamiento, entre otras acciones. La primera fase de rehabilitación del complejo monumental se centró en la recuperación del entorno natural con el abastecimiento de agua potable, la restauración de las corralinas y el entorno, la consolidación del muro del camino de los frailes y de la fuente del sarraceno, el saneamiento y tratamiento de aguas residuales con la instalación de una depuradora y la recuperación y mejora de los caminos y senderos de los pueblos de la Baronía de Escornalbou hasta el castillo monasterio.

A partir de este sábado, el monumento ya se puede volver a visitar. Para celebrar la reapertura se han organizado unas jornadas de puertas abiertas que coinciden con la feria Santa Teca. Se han programado varias visitas el sábado y domingo a las diez y media de la mañana, doce menos cuarto del mediodía, la una del mediodía, las cuatro de la tarde, las cinco y cuarto de la tarde y las seis y media de la tarde. No es necesaria la reserva previa.