Los agricultores gerundenses que cortan la AP-7 en Pontós (Alt Empordà) han plantado un pino de unos diez metros en medio de la autopista, en el carril que va en sentido norte. Con una máquina han hecho un agujero en el asfalto y han colocado una rueda como si fuera un tiesto. Después, con otra máquina han traído el pino y una retroexcavadora ha llenado de tierra el agujero con el fin de evitar que el pino caiga. En total, son unas 300 personas las que siguen concentradas en el corte de Pontós y han acabado aplaudiendo la acción. Todo esto, mientras esperan los resultados de la reunión entre los representantes de los sindicatos y de Revolta Pagesa con el conseller de Acció Climàtica, David Mascort. Ahora, los campesinos ya se preparan para comer de nuevo en la autopista, carne a la brasa y alubias. Desde el colectivo agradecen las muestras de solidaridad que han recibido en forma de donaciones de diferentes sectores.

En cuanto a los agricultores de Ponent concentrados en el corte de la A-2 en Tàrrega, refuerzan este jueves la protesta con la llegada de más campesinos y tractores con respecto a la jornada anterior. El portavoz de la plataforma Revolta Pagesa en este lugar, Jordi Solé, ha afirmado que después de tres días de protesta, este jueves prácticamente no ha hecho falta "hacer el trabajo de movilizar" a la gente, ya que esta está "movilizada y más unida que nunca". Sobre la reunión de esta mañana del conseller de Acció Climàtica, David Mascort, con Revolta Pagesa, los concentrados dudan de que dé frutos. "Las esperanzas son prácticamente nulas", ha dicho Solé. En la primera jornada de protestas en el corte de la A-2 en la capital del Urgell había unas 400 personas. Este número fue ligeramente a la baja durante la segunda jornada, mientras que este jueves ha repuntado, tanto con respecto a asistentes como a tractores, que vuelven a llenar algunos de los espacios vacíos que habían quedado en la autovía y en la rotonda que da acceso.

Con respecto a los agricultores de Tarragona, se han desplazado este jueves con algunos coches y furgonetas para relevar los compañeros de Ponent que hace más de 48 horas que cortan la AP 2 en Soses y para continuar las movilizaciones en el Segrià. "Hay una buena organización y ganas de continuar los cortes", ha dicho Ramon Rojo, uno de los campesinos que ha venido desde el Baix Camp. Asimismo, Rojo ha explicado que el sector está decidiendo si se organizan nuevas acciones en la demarcación de Tarragona o los agricultores tarraconenses se reparten en otras movilizaciones. Asimismo, el sector del campo en Lleida se ha disculpado con la población y las empresas de mercancías y ha culpado a los dirigentes políticos de las diferentes movilizaciones en Catalunya.

Protesta alargada "indefinidamente" en Pontós

Revolta Pagesa anunció ayer miércoles que mantendrá "de manera indefinida" los cortes de carreteras en la AP-7 en Pontós (Alto Empordà), la AP-2 en Soses (Segrià) y la A-2 en Tàrrega, en Ponent, así como en la C-14 en Bassella (Alt Urgell), en la N-260 en las Bordas, en el Pont de Suert (Alta Ribagorça), en la N-152 en Puigcerdà y en la C-38 en Coll d'Ares. En el tercer día de movilizaciones, los campesinos han decidido en las diversas asambleas mantener las protestas, y habrá quienes volverán a pasar la noche en las carreteras. Mañana por la mañana, además, hay cortes convocados en Alfarràs y en Almacelles, ambas en la comarca del Segrià.