Oriol Mitjà se ha contagiado. Así lo ha anunciado él mismo este miércoles en su cuenta de Twitter. Y ha aprovechado la ocasión para anunciar que ya ha llegado la séptima ola. En un hilo de tuits -encabezado por una foto con él sosteniendo un test de antígenos positivo- ha recordado que en los últimos días se está registrando un aumento de la incidencia, de las hospitalizaciones y de la cifra de muertos. Su hipótesis es que se infectó de coronavirus durante la Diada de Sant Jordi, mientras firmaba libros. A pesar de llevar mascarilla FFP2, la covid-19 me encontró, ha escrito al infectólogo. Como, según él, llega una séptima ola de esta pandemia, Mitjà ha pedido que el Departament de Salut "reintroduzca las pruebas, los aislamientos, las mascarillas y la ventilación".

En su retahíla de tuits, el médico apunta que "la población ha ido perdiendo inmunidad y además han llegado variantes más transmisibles como la BA.2 o la XE". "El 1 de abril se desguaza el sistema de pruebas y aislamientos, de manera que un positivo puede ir al trabajo e incluso en el hospital donde contagiará a personas vulnerables", ha lamentado el infectólogo. El doctor también ha apuntado que entre el 15 y el 25 de abril (Semana Santa, Sant Jordi...) la gente ha empezado a tener "más interacciones por vacaciones, festividades, gimnasios, cines, discotecas, etc". Y eso, sumado al hecho de que a partir del 20 de abril ya no hay que llevar mascarillas en los interiores, es un mal negocio, según él. Ya que la mascarilla era el elemento que más nos protegía de la infección del coronavirus. "También reducía la incidencia poblacional", escribe el infectólogo.

"Con el aumento de la incidencia, los vulnerables están más expuestos a las infecciones, y pueden acabar teniendo complicaciones; y además el sistema centinela (con solamente el testeo de 400 muestras semanales) resulta insuficiente para hacer estimaciones sobre la incidencia", escribe Mitjà. Para acabar sentenciando que, según él, "vamos a ciegas". Y para armar de valor sus palabras, el infectólogo ha citado unas declaraciones del secretario general de la Organización Mundial de la Salud (OMS): "Este virus no desaparecerá únicamente porque los países dejen de buscarlo. Todavía está extendiéndose, todavía está cambiando y todavía está matando. Cuando se trata de un virus mortal, ignorarlo no nos hará más felices". Según Mitjà, se trata de una intervención para "reñir" a muchos países.

Ya hace días que avisa

El pasado mes de marzo Mitjà ya se mostró indignado ante la decisión del Ministerio de Sanidad de acabar con el aislamiento por coronavirus y puso punto final a hacer pruebas diagnósticas. "Nadie en el timón", manifestó el infectólogo, que en un tuit en su cuenta de Twitter reconoció que, al leer la noticia, se había quedado "helado".