Un tribunal de Lleida deberá decidir si otorga la "invalidez total" a una funcionaria por supuesta alergia al wifi. Esta "alergia" es una expresión coloquial para denominar la electrohipersensibilidad (EHS) y el impacto de las ondas electromagnéticas de las conexiones inalámbricas.

El tribunal tendrá que posicionarse sobre esta cuestión, ya que, según han apuntado varios expertos, no está demostrado que exista esta alergia ni sus efectos. Es más, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), este problema no existe y no se ha probado en ningún caso.

Aunque no está claro de dónde proviene este malestar creciente a la gente que se expone a las ondas electromagnéticas, una funcionaría administrativa de la Generalitat solicita una pensión por incapacidad permanente tres años después de estar de baja. En un primer juicio, el juez falló en favor de la Seguridad Social y en contra de la afectada

Según ha detallado el marido de la afectada, esta no irá a juicio, ya que persisten los síntomas del malestar: "Tiene dolor de cabeza, sensación de ahogo, confusión mental, dificultad de concentración, la boca seca y fatiga", ha recogido El País.

Paralelamente, el marido también ha explicado que el caso se produjo el año 2011 con un cambio de oficina y empezó a encontrarse mal sin motivo alguno aparente. La afectada, según ha insistido el marido, no puede coger el transporte público ya que tiene wifi y duerme en el comedor, el lugar más aislado de la casa.

Sin embargo, según el mencionado diario, la Generalitat ha intentado ayudarla. La Administración habría hecho reformas y la habría trasladado de puesto de trabajo pero los problemas persisten, según su propio abogado. Paralelamente, la afectada decidió visitar a un médico y le diagnosticó ansiedad.