El que fue primer cap de Govern de la historia de Andorra, Òscar Ribas, ha muerto este viernes a la edad de 84 años en su residencia, en Sant Julià de Lòria. Ribas no solo es reconocido por su papel fundamental en la institucionalización democrática de Andorra, sino también por haber llevado el catalán a la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas.

Fue escogido primer responsable del ejecutivo en 1982 y fue una figura clave en el impulso de la Constitución, que se aprobó el año 1993. Además, tuvo un papel trascendental en el mundo empresarial del Principado, y su trayectoria en este sentido estuvo especialmente ligada al sector del tabaco y la banca.

Su muerte ha causado una profunda conmoción, y varias formaciones políticas e instituciones y personalidades del país están mostrando sus condolencias a través de diferentes foros, especialmente vía redes sociales.

El Govern de Andorra también ha mostrado su pésame vía Twitter y ha anunciado que el consell de ministres se reunirá este sábado para decretar el luto nacional. Se ha adelantado que debería ser equivalente al recientemente acordado por la muerte del ex-Copríncipe francés Valéry Giscard d'Estaign.

El Consell General le rendirá un tributo el próximo lunes durante la sesión tradicional de Sant Tomàs. Por otra parte, el funeral está previsto para mañana el domingo a las 10 de la mañana en la iglesia de Sant Julià i Sant Germà (en el mismo Sant Julià de Lòria), con presencia limitada a la familia por el cumplimiento de las medidas de seguridad de la Covid.

El vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, se ha unido a las muestras de respeto vía Twitter. El vicepresidente también ha reconocido su papel en el reconocimiento de Andorra y de la lengua catalana.

También ha dado el pésame el president en el exilio, Carles Puigdemont, que ha recordado su discurso en la ONU.

Òscar Ribas fue escogido conseller general en 1971, cargo por el que fue reelegido en 1975. Posteriormente, fue designado para encargarse de la cartera de Finanzas. En enero de 1982, se convirtió en el primer cap de Govern de Andorra, cargo del que dimitió en 1984 después de que el Consejo General no aceptara las propuestas de reforma institucional y económica del Principado, entre ellas la creación de una Constitución.

No fue hasta el año 1990 que volvió en el edificio administrativo y pudo impulsar el proceso de elaboración de la Carta Magna. Uno de los primeros hitos de este segundo mandato fue la firma del acuerdo aduanero con la Unión Europea, que había negociado su antecesor, el también político laurediano Josep Pintat. Posteriormente, también rubricó el tratado bilateral con Francia y España.

Finalmente, el año 1993 se aprobó la Constitución. Ribas protagonizó, el 28 de julio, el primer discurso de un mandatario andorrano ante las Naciones Unidas, fue el primer discurso oficial que se pronunciaba en catalán.

Aunque las elecciones de finales de 1993 lo volvieron a convertir en cap de Govern, el cargo le duró menos de un año. En noviembre de 1994 se sometió a una moción de confianza, basada en el proyecto de nuevas reformas económicas y en especial en la necesidad de promulgación de una Ley general tributaria. La perdió y, por lo tanto, tuvo que dimitir y fue sustituido por el cap de Govern entre 1994 y 2005, Marc Forné.