La influencer canaria, Hilda Siverio, murió este jueves, a los 52 años, después de 9 años de lucha contra un cáncer. Siverio, de Santa Cruz de Tenerife, se hizo popular en las redes sociales, en concreto en Instagram y TikTok, dándole visibilidad al cáncer de mama que sufría desde el año 2014. Su sonrisa y su actitud positiva ante la vida atrajo en más de 1,5 millones de seguidores en TikTok. "Un poquito más","Que bonita es la vida", eran algunos de los lemas que repetía en todas sus publicaciones. El estado de salud de Hilda Siverio se agravó en las últimas semanas, y ya se encontraba en una situación "muy crítica" en el hospital desde el 9 de enero, según explicó su hija a través de las redes. Su muerte la ha comunicado el alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez: "Una luchadora infatigable, un ejemplo de vida ante la adversidad, nos deja hoy".

Sonrisa eterna

El pasado mes de enero, su hija mayor, comunicó a través de las redes que Hilda había vuelto al hospital y su pronóstico era crítico. Desde entonces recibió curas paliativas, según ha informado el diario canario El Día, y ella misma lo explicaba a través de las redes. En su último vídeo, Hilda afirmó "aquí estoy, luchando como una campeona", mensaje que ya hacía temer a sus seguidores sobre su estado de salud. Siverio, con más de 300.000 seguidores en Instagram, buscaba ser recordada por como vivió. Aparte, de su tarea a través de las redes sociales, impulsó su página 'Sácale, una sonrisa al cáncer', que ha sido traducida a varios idiomas como el inglés, el chino o árabe. En sus redes sociales siempre utilizó la etiqueta "#Unpoquitomás" o #quebonitaeslavida porque Hilda siempre escogió sonreír para arrastrar y ayudar a miles de personas durante su experiencia por la enfermedad.

Hilda fue diagnosticada de cáncer, el año 2014, cuando estaba embarazada de su tercer hijo. Decidió esperar hasta la semana 34 - cuándo le provocaron el parto - para iniciar el tratamiento y eso redujo sus posibilidades de supervivencia. "Tres tumores en la mama izquierda con micrometástasis en la zona linfática y dos en la derecha. No vi a mi bebé hasta los 21 días porque estuvieron haciéndome pruebas, me hicieron la mastectomía, empezaron con la quimio, la más fuerte, me sacaron también los ovarios y las trompas...", explicó la influencer en el diario El Mundo hace un año.

Las dos caras de las redes

La influencer canaria recibió mucho apoyo a través de las redes, tanto de personas anónimas como de famosos como Soraya, Falete, Rozalén... pero también odio y comentarios desafortunados. En sus últimos momentos, su hija había denunciado acoso y amenazas en las redes de gente que exigía información constante sobre su estado de salud. Incluso, indicó que habían vivido situaciones complicadas con el intento de acercamientos a su madre con la intención de hacer fotos de la enferma.

En la otra cara, se sitúa su actitud positiva que ayudó a mucha gente. Hilda reconoció que diariamente recibía mensajes de enfermos de cáncer que no conseguían entender su manera de afrontar su destino y los lemas que no paraba de repetir: "Prefiero morirme que dejar la vida" y "Sácale una sonrisa al cáncer". En uno de sus últimos vídeos explicó que: Me escribían otros enfermos diciendo: ¿Cómo puedes reír sabiendo que dejarás solos a tus hijos? Y yo los digo: sé que me estoy muriendo, nadie tiene que decírmelo, pero te enseñaré otro camino. ¡Te queda un mes, te quedan dos, te quedan tres, vivo"!.