Hace 24 horas que no saben dónde está su hija y no saben cuál puede ser su paradero. La madre de Martina Alemany está preocupada pero mantiene la serenidad que hace falta para seguir manteniendo la fuerza para encontrarla. Ahora mismo los Mossos van hacia la vivienda familiar, donde está el padre de Martina, con la nota que han encontrado esta mañana en el buzón.

"La dejó ayer antes de irse", dice Ester Casas a El Nacional, "pero no hemos abierto el buzón hasta hoy". La policía va ahora a recoger la nota para comprobar que realmente sea suya y ver si puede dar pistas del lugar donde haya podido ir.

Esta mañana El Nacional ya adelantaba que la principal hipótesis de la policía era que se había marchado voluntariamente. Y la nota que han encontrado los padres en el buzón lo confirma: "Os quiero. Estad tranquilos. Me he ido. Estaré bien".

"Estamos fastidiados. No sabemos dónde está nuestra hija", dice la madre de Martina a este diario. La búsqueda se ha centrado las últimas 24 horas en Barcelona, sobre todo en sus lugares de referencia. Pero ahora la investigación ya va más allá.

La policía ha entrevistado a todo su círculo de amigos y ninguno de ellos ha sabido decir dónde podría estar Martina. Buscan en la ciudad y fuera. Lo que parece más improbable es que se haya ido a Andorra, donde ha pasado largas estancias con su madre durante las temporadas de esquí. "No tiene mucho sentido. Había subido mucho con ella pero ahora ya no tenemos la caravana", ha indicado.

Ester Casas dice que ha tratado de ayudar a la policía tanto como ha podido pero que no sabe ni qué se ha llevado Martina dentro de la mochila. "Es muy difícil saber qué se ha llevado de un armario de una adolescente", dice. "No nos estás dando pistas", explica Casas, que le han dicho los Mossos. "¡Es que no tengo pistas!", dice que replicaba ella ayer cuando fueron a denunciar la desaparición.

La noche antes Martina "estaba normal", cuenta su madre. "Estuvo jugando con su hermano" y nada hacía pensar que pudiera huir sin decir nada. Ester Casas admite que "está en tratamiento y la van controlando", pero ahora mismo "no es la peor época de su enfermedad". Martina padece un trastorno alimenticio desde hace años que le obligaba a llevar un control médico y había estado ingresada en alguna ocasión para controlar las comidas y el peso.

La madre de Martina se encuentra en el Institut Ipsis, donde estudia su hija y donde tiene el apoyo de los maestros y los otros padres que la han ayudado a hacer difusión de la desaparición. El padre de Martina está en casa esperando por si vuelve.

La investigación

La policía sigue una línea de investigación para encontrar a la chica y ha ampliado la investigación fuera de Barcelona. Todas las hipótesis están abiertas, pero ahora mismo la que toma más fuerza es la de la huida voluntaria, y más tras haber encontrado la nota en el buzón donde la joven asegura que se ha ido y que estará bien.

Los Mossos han interrogado a todo el entorno de la chica. Desde familiares y amigos, hasta las últimas personas que la vieron. A partir de su relato intentan reconstruir la historia y saber los motivos por los que Martina habría podido desaparecer.

La policía está rastreando la ciudad y siguiendo los pasos de la chica. Según ha podido saber El Nacional, el móvil de la joven está apagado. Los Mossos están mirando también las cámaras de seguridad de los transportes públicos para seguirle la pista, en caso de que se haya marchado de Barcelona. La policía ha ampliado, además, la búsqueda fuera de la ciudad.