Un intento de homicidio destapa la mayor banda de la mafia china en Catalunya. "Bang de Fujian", el nombre de la facción, se dedica al tráfico de seres humanos, a obligar a prostituirse a chicas chinas en locales de Barcelona, a dar préstamos a ciudadanos chinos en el Casino de Barcelona y al cultivo industrial de marihuana. Estaba afincada en el barrio del Fondo de Santa Coloma de Gramenet.

El verano pasado los Mossos ya desarticularon su banda rival que operaba básicamente en la zona del Arc de Triomf de Barcelona.

El control de los préstamos a jugadores chinos en el Casino de Barcelona es lo que motivó el intento de homicidio a un ciudadano chino que había dejado dinero a un familiar suyo intentando romper el monopolio que ostentaba la Bang de Fujian. Los hechos que pasan en agosto del 2016 ponen en alerta a la policía. La víctima delata a la banda y toda la información que da a los Mossos d'Esquadra activa una operación que ha acabado con 25 detenidos, 22 mujeres liberadas y la desarticulación de la principal facción de la mafia china que operaba en Catalunya.

La policía ha detenido a los siete jefes de la mafia, ninguno de ellos tiene antecedentes, aunque han aparecido en operaciones anteriores. Entre ellos hay uno de los cabecillas de la operación Turandot, que desmontó la explotación de personas en talleres textiles ilegales. "Nunca se les había podido coger ni detener", ha explicado el inspector Jordi Domènech, jefe del Área Central de Investigación de Personas. "Muchos tienen negocios lícitos para llevar negocios ilícitos", añade el inspector, desde karaokes y restaurantes, hasta bazares y pastelerías.

La banda tiene sus orígenes en la explotación de talleres textiles, pero en poco más de un año da el salto cualitativo al crimen organizado con el cultivo industrial de marihuana. Tenían plantaciones profesionales con extractores, buena instalación eléctrica, dobles paredes para esconder la droga, riego automático, secadores y seguridad. Hacían una cosecha al mes y por cada cosecha ganaban 300.000 euros.

marihuana mafia china / mossos|mozos

Red de prostitución

La actividad principal de la organización era la del tráfico de seres humanos con finalidad de explotación sexual en prostíbulos gestionados por la banda y situados principalmente en Barcelona y en otras poblaciones del Área Metropolitana. Traían a las mujeres de forma irregular desde China hasta Barcelona con una escala previa en países con medidas de control migratorio más laxas que nuestro país y allí las proveían de documentación falsificada con la finalidad de que tuvieran acceso al territorio europeo.

Las mujeres adquirían una deuda de entre 10.000 y 15.000 euros que tenían que abonar con el ejercicio de la prostitución. En ocasiones los arrestados las engañaban y desconocían cuál era su destino y la actividad que tendrían que ejercer una vez llegaran a Barcelona.

La banda contaba con una estructura diseñada para el control de las mujeres: un miembro destacado de la organización se ocupaba de liderar el negocio mientras que la gestión más directa estaba a cargo de una mujer que hacía de madama, en China denominada "Mama San". Además, en los prostíbulos también había el "Da ge" que se ocupaba de la seguridad y del control de las mujeres en ausencia de la Mama San.