Casualidad o no, el pleno de la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de justicia de Catalunya con el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder, Judicial Carlos Lesmes, ha coincidido con el primer día de campaña del referéndum y la escalada de presión judicial para intentar pararlo.

En la salida de la reunión, Lesmes ha dejado claro que los jueces no suspenderán de oficio ninguno de los actos de campaña. "Si reciben peticiones en este sentido ellos decidirán si es oportuno o conveniente. Dependerá de cada juez".

"Los jueces pueden actuar en ocasiones de oficio pero habitualmente lo hacen a petición de las partes, por descontado uno petición de este tipo tiene que ser del abogado del estado, o puede ser la Fiscalía, y dependerá de cada juez, valorando las cirsumstàncies del caso y con absoluta independencia", ha remarcado el jefe de todos los jueces del estado español.

Lesmes ya anunció, cuando tomó posesión del cargo, que quería está más cerca de los jueces y que haría territorio. Y hoy asiste al pleno del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya convocado por Jesús Maria Barrientos.

Ante la situación excepcional en la que se encuentra Catalunya y también algunos de los jueces que tienen en sus manos las querellas de la Fiscalía contra el Parlamento y los miembros del Govern de la Generalitat, la situación crítica se ha tratado a la reunión. Lesmes ha admitido que han tratado sobre la situación que se ha generado a raíz del avalancha de querellas y ha dicho tajantemente que ha visto a los jueces catalanes "están en una posición de serenidad, tranquilidad y de compromiso para actuar con plena independencia, imparcialidad y responsabilidad en la defensa del ordenamiento jurídico".

El presidente del Consejo General del Poder Judicial no ha querido desautorizar la Fiscalía, que ha pedido la declaración e imputación de los alcaldes que dan apoyo al referéndum y las ha calificado de actuaciones "preventivas".

También ha dejado muy claro que la ley de los jueces es la Constitución y el ordenamiento jurídico vigente y que las leyes aprobadas por el Parlament están anuladas por el Tribunal Constitucional y que, delante de este escenario, los jueces catalanes se deben al mandato de la Constitución y el TC.

La reunión ordinaria, que se celebra cada tres meses, por motivos de agenda y vacaciones veraniegas ha coincidido con el día que arranca la campaña para la votación el 1 de octubre del referéndum de autodeterminación y Lesmes ha aterrizado en Barcelona