Parecía que iba al suelo, pero todavía no. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha rechazado el derribo del hotel El Algarrobico, un edificio de 21 plantas y 400 habitaciones situado en la localidad costera de Carboneras (Almería). La justicia ha considerado que antes de derribarlo hace falta anular la licencia de obras que otorgó el ayuntamiento en el 2003, que todavía es vigente, según el auto en la cual ha tenido acceso elDiario.es.
"Es decepcionante", ha dicho María José Caballero, portavoz de Greenpeace, la asociación que pidió derribar el hotel situado a tan sólo catorce metros del mar. El activista ha recordado que en el 2018 ya pidieron al ayuntamiento que modificara el Plan General de Ordenación Urbana del municipio, que todavía no ha sufrido ningún cambio.
Terreno no urbanizable
El auto argumenta que "el derribo por razones de legalidad de las obras construidas es una decisión que corresponde a la administración, una vez finalizado el procedimiento de revisión de la licencia." "La obra dispone de un título jurídico válido mientras no se establezca el contrario", añade.
Asimismo, el TSJA obliga a "admitir y tramitar el procedimiento administrativo previsto de revisión de la licencia de obras, por posible existencia" de una ilegalidad. Y es que el Tribunal Supremo sentenció el año 2016 que el hotel se encontraba sobre el "terreno no urbanizable de especial protección del parque natural de cabeza de Gata".
Posible delito de desobediencia
El ayuntamiento ya ha comunicado que han iniciado los trámites necesarios, pero todavía no han enviado la nueva calificación al Boletín Provincial, razón por la cual el trámite no es efectivo. "No les importa tener el símbolo de la destrucción de la costa en su litoral", ha denunciado a la portavoz de Greenpeace.
Caballero ha criticado que "la justicia los dice claramente que actúen, pero no hacen caso". "Lo más probable es que vamos al Supremo y, a partir de aquí, estudiaremos acciones contra el Ayuntamiento de Carboneras, que hace tres años que sigue sin hacer nada", ha explicado. Asimismo, Greenpeace ha enviado un escrito al TSJA para que tengan en cuenta un "posible delito de desobediencia" del alcalde.
Protestas de Greenpeace ante las obras del hotel El Algarrobico / Europa Press
Más allá de estar en terreno no urbanizable, Greenpeace también defiende que la distancia entre el hotel y el mar incumple la Ley de Costas. Sin embargo, los ecologistas aseguran que las obras de derribo del hotel se pueden hacer en cualquier momento y que crearían en torno a 400 puestos de trabajo.
Fue el año 2005 cuando se paralizaron las obras y se prometió su derribo inmediato, pero después de veinte pronunciamientos judiciales que demuestran su ilegalidad, todavía no se ha tirado al suelo.
Imagen principal: Las obras paralizadas del hotel El Algarrobico / Europa Press