Con la resolución del Tribunal Supremo sobre su competencia para juzgar a los miembros del Govern, Carme Forcadell, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, se activa también la cuenta atrás para el juicio.

En el mismo escrito en que la sala presidida por Manuel Marchena estima parcialmente las declinatorias y envía al TSJC a los miembros de la Mesa y a Mireia Boya, abre el plazo de 10 días para que las defensas presenten sus escritos.

El plazo empieza mañana, 28 de diciembre, día de los Inocentes. El 9 de enero del 2019 es el día límite para presentar los escritos, a no ser que el Tribunal Supremo conceda más margen, como también hizo con las acusaciones.

Las defensas ya anunciaron que pedirían entre 30 y 50 días más de plazo. No está claro que Marchena amplie tanto el plazo de entrega.

Una vez presentados los escritos, se tiene que resolver la lista de testigos que pasarán por la sala del Tribunal Supremo para probar los argumentos de las defensas y las acusaciones. Y todavía hay que ajustar los días en que se celebrará el juicio, que podria durar unos tres meses de febrero a abril. Si las previsiones se siguen cumpliendo, Marchena podría dar inicio al juicio entre la última semana de enero y la primera de febrero.

Los primeros quince días se destinarán a las declaraciones de los 12 acusados, que se trasladarán a prisiones de Madrid para seguir el juicio. La sala tendrá que fijar un horario de sesiones que permita seguir las jornadas densas en la sala y preparar las vistas entre abogados y acusados. Y eso hace replantear la hipótesi de que finalmente el juicio tenga sesiones de mañana y tarde de lunes a viernes. La opción con sesiones de mañana entre el martes y jueves toma fuerza.

Se prevé que el juicio tenga una duración aproximada de unos tres meses, lo que hará que no vaya más allá del mes desde mayo y que la sentencia no se conozca hasta el verano.

Después de este juicio tendrá que empezar el que se celebrará en la Audiencia Nacional y que sentará en el banquillo de los acusados al mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, al exsecretario de Interior César Puig, el exdirector de la Policia Pere Soler y la intendente Teresa Lapana. Aunque la instrucción de esta parte del caso fue más rápida y ya se tendría que haber señalado el juicio, la sala espera el juicio a los miembros del Govern y que implica penas de prisión, antes de juzgar y sentenciar a los responsables de los Mossos d'Esquadra por los hechos de los días 20 de septiembre y 1 de octubre.