La situación de emergencia por sequía que está viviendo Catalunya ha llevado al Govern de la Generalitat a tomar decisiones, entre las más importantes las restricciones sobre el consumo del agua que también afecta al riego de parques y jardines, tanto públicos como privados. Sin embargo, la sequía no te tiene que obligar a renunciar a tener plantas en casa, una buena opción puede ser un jardín seco, es decir, un jardín que no necesita seco. Con todo, hace falta tener en cuenta que en momentos puntuales si necesitará aportación de agua, pero mucho menos que un jardín al uso. Te aportamos algunos trucos para conseguir el mejor jardín seco para tu casa.
¿Qué es un jardín seco?
Cuando hablamos de jardín seco nos referimos a aquel que consume los mínimos recursos hídricos posibles para crecer y mantenerse, todo y que, en la frase de crecimiento de las plantas probablemente si se necesitará regarlas. Ahora bien, una vez creado y establecido, no se necesita casi nada de agua más allá de las lluvias, para mantenerse sano. Depende del ambiente donde se construya este jardín se podrán utilizar unas plantas u otras. No todas las plantas son válidas por este tipo de jardines, ya que hay algunas especies que necesitan que se riegue cada día, mientras que otros pueden estar una temporada sin necesitar agua.
Para construir un jardín seco es mejor seleccionar plantas que se adapten a climas áridos, como la sabana o el interior o el Mediterráneo. Algunas de las especies incluyen agaves, cactáceas y suculentas, pero también es posible llevar flores y árboles, siempre que tengan raíces profundas y puedan adaptarse mejor en este tipo de paisajismo que recibirá menos agua.
¿Cómo construir un jardín me siento?
Antes de planificar un jardín seco es importante conocer las condiciones bioclimáticas del lugar|sitio donde se colocará. En este sentido, será importante analizar la cantidad de luz solar, la cantidad de lluvia y la temperatura media de la zona. Con toda esta información, el ideal sería hablar con algún experto que dé consejos sobre las plantas que mejor se adecuarán a estas condiciones. Una buena opción es escoger plantas locales, ya que, tendrán un ambiente más seguro y servirán para mejorar la fauna local. Este fenómeno se conoce como "paisajismo naturalista" que ayuda a transformar el paisaje de una forma más sostenible. Aparte de las plantas, también se pueden utilizar otros elementos naturales como la arena, piedras y rocas, así como varias figuras artesanas como jarrones de cerámica o de fibras naturales para integrarse con la vegetación, y así integrar el jardín con la estructura de la casa.
A modo de inspiración, una buena combinación puede ser mezclar vegetación de follaje plateado, terciopelo y aromático, con brillantes gramíneas que se pueden mover con el viento, arbustos, así como diferentes texturas y colores. Cada vez existen más especies tolerantes a la sequía. En ambientes mediterráneos se pueden incorporar especies como gramíneas, como Hyparrhenia hirta y Stipa gigantea, arbustos, plantas de menor tamaño como Sàlvia argentea, Euphorbia rigida y Stachys byzantina, suculentas como Sedum sediforme, o árboles como el olivo (Olea europaea) y la encina.