Un juez de Barcelona ha citado como investigados el mes de febrero próximo dos cargos intermedios de los Mossos d'Esquadra denunciados por un agente, que los acusa de asediarlo laboralmente por negarse a reescribir un atestado policial en catalán.

Según ha informado hoy el diario El Mundo y han confirmado a Efe fuentes próximas al caso, los dos cargos intermedios, de la comisaría del distrito de Sant Andreu de Barcelona, han sido imputados por un delito de prevaricación y otro de acoso laboral.

Los dos mandos investigados tenían que comparecer ante el juez a principio de este mes de enero, si bien su declaración se pospuso por motivos de agenda y finalmente han vuelto a ser citados para mediados del próximo mes de febrero, según han informado a Efe las fuentes consultadas.

El agente denuncia que, cuando sus mandos le pidieron que reescribiera parte de un atestado en catalán, ya que lo había hecho inicialmente en castellano, solicitó una orden escrita, al considerar que se trataba de una medida ilegal, amparándose en la cooficialidad de las dos lenguas en Catalunya.

Castigo profesional

A raíz de esta petición, según el denunciante, los dos mandos lo castigaron profesionalmente, lo trasladaron de su labor en seguridad ciudadana y lo relegaron a la recepción de la comisaría.

El agente denunció este conflicto laboral a nivel interno, por lo cual se activó un protocolo de resolución de conflictos que le ha permitido devolver a su función anterior en seguridad ciudadana.

No obstante, el mosso ha llevado el caso finalmente a la Justicia porque cree que los dos mandos se extralimitaron y que intentaron recortar su derecho a escribir el atestado en castellano, según las fuentes.