El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) sigue apostando por la zona baja del Besòs como un eje para la regeneración urbana, la transformación social y la recuperación de espacios naturales tanto para el disfrute de la ciudadanía como para el impulso del medio ambiente. Por un lado, el plan IMPULS Besòs prevé una inversión de 15 millones de euros para transformar una de las zonas más vulnerables del territorio metropolitano, con una visión transversal e integrada que supera la fragmentación territorial y responde a retos compartidos. Por otro lado, el ente metropolitano da un paso al frente en la renaturalización de la desembocadura del río Besòs. El proyecto ReViuBesòs, que ha ganado una subvención de los fondos FEDER de la Unión Europea, apuesta por la recuperación ecológica, social y paisajística de la desembocadura del río Besòs, en Sant Adrià del Besòs.
IMPULS Besòs, tres ejes con sinergias europeas
El proyecto IMPULS Besòs, un plan de actuación integrado (PAI) alineado con la Agenda Urbana del ente metropolitano, permitirá la transformación de una de las zonas más críticas urbanística y socialmente del territorio metropolitnao, con tres ejes estratégicos diferenciados, conectado con otros proyectos del AMB con los que incorpora los aprendizajes de diversos proyectos europeos de innovación urbana. Antonio Balmón, vicepresidente ejecutivo del AMB afirma que “IMPULS Besòs se presenta como el único laboratorio de innovación urbana liderado por una administración metropolitana en España y orientado a la escalabilidad de sus proyectos en todo el territorio metropolitano. El programa despliega iniciativas como la transformación y mejora de la C-31 para minimizar el efecto barrera y mejorar la conectividad”. También destaca la calidad de los proyectos presentados por el AMB y los ayuntamientos metropolitanos, hecho que se demuestra con el impacto presupuestario que tendrá para el territorio. “Además, incorpora aprendizajes de proyectos europeos para mejorar la resiliencia urbana, a fin de consolidarse como un referente en transformación urbana y cohesión social”, constata Balmón.
El proyecto se estructura en tres ejes estratégicos: un eje cívico, que pretende mejorar la habitabilidad y la convivencia en la C-31, la Gran Vía Metropolitana, impulsando la movilidad a pie y en bicicleta y ordenando los pasos inferiores para mejorar la seguridad; un eje histórico, con la transformación de la antigua N-2 (Avinguda de Alfons XIII en Badalona y Pi i Maragall en Sant Adrià), a partir de la regeneración urbana del eje con especial énfasis en el corredor inteligente de bus metropolitano y la bicicleta; y un eje azul, que con la mirada puesta en el río Besòs regenerará el paseo fluvial en el tramo Pollancreda - pont dels Passadors, con nuevos usos sociales y ambientales. Para materializarlo, se prevé una inversión de 15 millones de euros, seis de los cuales provienen del gobierno español y 9 serán asumidos por el AMB y los Ayuntamientos de Badalona y Sant Adrià del Besòs. Las ayudas del gobierno español se enmarcan en las estrategias de desarrollo integrado local (EDIL) que se canalizan mediante los fondos europeos FEDER 2021-2027.
12 actuaciones en 6 barrios
A través de una intervención integral que combina renaturalización, digitalización y dinamización socioeconómica, IMPULS Besòs se convierte en un modelo reproducible en otras zonas vulnerables del territorio metropolitano y en un referente de cooperación entre administraciones y actores clave del territorio. Consta de 12 actuaciones transformadoras en 6 barrios de Badalona y 2 barrios de Sant Adrià de Besòs, para regenerar y transformar el territorio, mejorar la calidad de vida, fomentar la sostenibilidad y superar barreras de infraestructuras que provocan la fragmentación del territorio y separan las comunidades a ambos lados. Aparte, se articula con otras actuaciones del AMB, como la renaturalización del río Besòs, y tiene sinergias con proyectos europeos de innovación que impulsan estrategias de adaptación climática o repensar las grandes infraestructuras metropolitanas.
2,7 millones de euros para renaturalizar la desembocadura del Besòs
Para seguir impulsando la estrategia de renaturalización y recuperación del río Besòs, puesta en marcha hace dos décadas por las diferentes administraciones locales y el ente metropolitano, el AMB ha conseguido una subvención europea para el proyecto ReViuBesòs, que permitirá renaturalizar el delta del Besòs. Su objetivo principal es la recuperación ecológica, social y paisajística de la desembocadura, y tiene un presupuesto de 2,7 millones de euros, un 40% de los cuales provienen de la subvención con fondos FEDER que gestiona la Fundación Biodiversidad, y que también ha recibido un proyecto de renaturalización de zonas verdes en Barcelona impulsado por el Ayuntamiento de la capital catalana. Ramon Torra, gerente del AMB, ha afirmado que “esta propuesta representa la consolidación de una transformación constante y permanente del río Besòs, que hace dos décadas era un espacio degradado y hoy en día encontramos un corredor ecológico de gran calidad ambiental y paisajística al servicio de los ciudadanos. Este proyecto con visión 100 % metropolitana también supone un salto cualitativo que servirá para mejorar el tramo final de la desembocadura y adaptarlo a los efectos del cambio climático”.
Filo Cañete, alcaldesa de Sant Adrià, ha afirmado que “el proyecto ReViuBesòs tiene como finalidad la transformación del delta del Besòs y de su desembocadura en un espacio más dinámico, resiliente y al servicio de la ciudadanía, al tiempo que se garantiza la protección y la conservación de sus valores naturales. Asimismo, se promueve la biodiversidad y se refuerza la capacidad de adaptación del territorio y de la ciudad a los efectos del cambio climático”. “El Ayuntamiento de Sant Adrià está impulsando un conjunto de actuaciones de mejora en el entorno urbano del río Besòs y de su zona fluvial. Queremos llevar a cabo una segunda regeneración de este espacio emblemático de la ciudad, en la línea de la transformación iniciada a principios de la década de los años 2000 con la recuperación del río”, ha indicado la alcaldesa en sus declaraciones.
¿Qué se hará en la desembocadura?
El proyecto, compartido entre el AMB y el Ayuntamiento de Sant Adrià del Besòs, se fundamenta en tres líneas estratégicas: renaturalizar el delta para potenciar la biodiversidad, reorganizar los recorridos para peatones y bicicletas para evitar la masificación de algunas áreas garantizando la accesibilidad y recuperar la desembocadura del río como conector ecológico. Para hacerlo posible, se llevarán a cabo diferentes acciones. Por un lado, se construirá un canal paralelo al río entre el final de la zona de uso público y la desembocadura para distribuir agua al sistema y proteger la fauna. También se recuperarán las lagunas y las zonas inundables existentes en el cauce del río, para restaurar la vegetación propia de los márgenes y riberas fluviales, y se crearán nuevos humedales conectados al canal principal para aportar nuevos ecosistemas y proteger la fauna. Por último, se construirá una balsa de agua salina en el margen izquierdo del río más próximo al mar, para proporcionar el crecimiento de vegetación adaptada, como las salicorinias o los juncos, y para poder reintroducir especies animales amenazadas que han desaparecido del ámbito fluvial del Besòs como el fartet.
Un corredor azul en el Besòs
Este proyecto da continuidad a las políticas de transformación del río Besòs que la AMB está llevando a cabo, entre las que destaca la construcción de un refugio de biodiversidad en Santa Coloma de Gramenet, en la primera fase del proyecto de renaturalización del río. La segunda fase de este, que se está ejecutando, prevé construir ecosistemas artificiales para incrementar la biodiversidad del río Besòs y conectarlo con los espacios naturales cercanos, como el parque de Can Zam y la serralada de Marina, con el objetivo de coser y consolidar la infraestructura verde metropolitana en este ámbito. De forma paralela, la gestión y mejora de las zonas verdes alrededor del río, así como las actuaciones en las playas de la desembocadura, son otras herramientas para conseguir una mejora ambiental y ecológica en el delta del río Besòs. Para concienciar a la ciudadanía respecto de la importancia ecológica de este ámbito, en las dos playas de la desembocadura hay Naturaules, equipamientos educativos donde se realizan actividades a través del programa Aprenem a la Xarxa, un programa que quiere favorecer el vínculo de la ciudadanía con los parques y playas metropolitanos.