Son jóvenes y lo tienen claro. El movimiento social y medioambiental impulsado por Greta Thunberg, Fridays for Future (Viernes para el futuro), reclama emprender acciones y legislaciones ambientales para cuidar del medio natural, del ecosistema que nos rodea y combatir así la actual situación de emergencia climática que nos afecta. El cambio climático ya no existe, ya se ha producido; y si no actuamos al respecto, la situación empeorará.
Fridays for Future no es ninguna moda. El movimiento ha llegado para quedarse y para protestar
Maria Serra tiene 17 años, es estudiante de segundo de bachillerato en el Instituto Montserrat de Barcelona y desde febrero de 2019 es la portavoz de Fridays for Future Barcelona. Quedamos para tomar un café con ella y explica a ElNacional.cat la importancia de asistir a la manifestación de la huelga mundial por el clima convocada este viernes, 27 de septiembre, en el centro de la capital catalana.
¿Cómo nace el movimiento Fridays for Future?
Es un movimiento que nace en Suecia de la mano de una chica de 15 años, Greta Thunberg ―que ahora tiene 17―. Lo que hizo Greta fue hacer huelga todos los viernes y plantarse ante el Parlamento sueco, un pequeño gesto al que se fue añadiendo gente y más gente. Ahora es un movimiento internacional de jóvenes, y no tan jóvenes, de 4 millones de personas, que se manifiestan por un futuro que, debido a la emergencia climática, ahora mismo no tenemos.
¿Cuándo tomas conciencia de la problemática ambiental y cómo te involucras personalmente?
En el colegio siempre nos habían explicado el cambio climático como un cuento, como un problema que está allí... Recuerdo a medianos del año pasado ver un vídeo de Greta y preocuparme. Empecé a buscar documentales y vi unos cuantos, recuerdo uno de Leonardo DiCaprio que me despertó de golpe: ¡esto es muy importante, es muy grave y nadie habla de ello!
Eso justo coincidió cuando Unim forces, el actual Fridays for Future Barcelona, hizo la primera asamblea pública. Me llegó a través de Twitter y fui. Estuve en la asamblea fundadora sin saberlo y desde entonces he estado involucrada.
¿Qué acciones lleváis a cabo?
Hasta ahora lo que habíamos hecho eran manifestaciones, huelgas y concentraciones todos los viernes, pero ahora hemos pasado a la acción directa. Ante la inacción de los políticos y la pasividad absoluta, después de un año de estar manifestándonos, nos hemos visto obligados a ser más contundentes.
¿De qué acciones hablamos?
Esta semana, por ejemplo, estuvimos en las fiestas de la Mercè e hicimos una performance con gente colgada. El pasado domingo cortamos la Meridiana. Lo que hizo el Ayuntamiento el Día sin Coches fue cortar media Via Laietana, cosa que a nosotros nos parece ridículo e insuficiente en un día sin coches. Quisimos cortar la Meridiana y demostrar con actividades lúdicas cómo sería la ciudad si devolviéramos el espacio que se le ha sacado al ciudadano y que ahora ocupan los vehículos.
Este lunes la voz de la activista Greta Thunberg llegó a la ONU, a la cumbre de acción climática, con un discurso claro y contundente: una crítica a los gobiernos, a la administración y una defensa a esta nueva generación de jóvenes que salís cada viernes a la calle para protestar y reivindicar acciones y políticas medioambientales. Es anómalo ver como alguien tan joven toma la palabra, es escuchada y consigue plantar cara a instituciones y a gobiernos de todo el mundo... ¿Creéis que se tomará conciencia al respecto?
Es muy irónico, porque nos encontramos con que no se ha escuchado a los científicos durante 30 años y, de golpe, se nos escucha a nosotros. Nosotros intentamos hacer de altavoz de los científicos e investigadores, ya que a ellos no se les escucha y llevan años alertándonos de la problemática. ¿Se nos está escuchando? Sí, somos 4 millones de personas, se está hablando de ello más que nunca. ¿Servirá de alguna cosa? Para eso estamos.
¿Por qué no se escucha a los científicos y a vosotros sí?
Porque no interesa. Porque el mensaje que damos es que este sistema que conocemos no puede continuar. Es un mensaje que hace daño, que no interesa a nadie y que da mucho miedo. Nosotros protestamos por la crisis climática, que contiene entre ellas la crisis atmosférica, las 200 especies que se extinguen al día, las desigualdades, la gente que está sufriendo, etc. Supone cambiar lo que conocemos hasta ahora.
¿Nos encontramos ante un escenario de emergencia climática?
Cambio climático no existe, son los padres. Es una crisis. Si hablas de cambio, la gente no lo asocia a un hecho alarmante. Al decir crisis o emergencia, a la gente le impacta mucho más.
"Cambio climático no existe, son los padres"
¿La situación actual es irreversible o todavía estamos a tiempo de solucionarlo?
No, pero estamos muy cerca de que lo sea. Estamos a tiempo de solucionarlo y por eso luchamos. Estamos a 10 años de que en el 2030, en teoría, según el IPCC (Intergovernmental Panel Climate Change), lleguemos a un periodo de un grado y medio más, lo cual desencadena el sistema de retroalimentación de la Tierra, que haría que el planeta se empiece a calentar por sí mismo. Una vez se dé, no hay marcha atrás, es irreversible. Si acaba pasando, está calculado que en el 2100 llegaremos a 6 grados de calentamiento global y será un hecho totalmente incompatible con la vida.
¿Qué medidas podemos tomar a nivel personal?
Se puede hacer poca cosa a nivel individual porque es un cambio sistemático. Lo que se necesita es un cambio estructural. Llevan años diciéndonos: "Sí, recicla, cambia las bombillas...". No, eso era el 2000. Ahora nos encontramos en otro estadio. A nivel individual somos partidarios de no tratar y no culpar al individuo, porque no es culpa tuya estar adaptado a un sistema que no funciona. Pedimos medidas a nivel estructural y, desde Fridays Barcelona, hemos propuesto siete medidas a la alcaldesa de Barcelona, con quien este viernes nos reuniremos. Temas que tienen que ver con el fin de la expansión de infraestructuras fósiles, un peaje anticontaminación, apostar por la transición energética, la gestión de residuos, la desinversión de combustibles fósiles, la soberanía alimentaria y la comunicación y sensibilización pública.
El Observatorio de la Sostenibilidad sitúa como principales conclusiones del informe 2018 un conjunto de compañías energéticas como las más contaminantes, las que generan más gases de efecto invernadero. ¿Qué se tiene que hacer al respecto?
Según Greenpeace, unas 100 empresas son las responsables del 70% de las emisiones. Ante eso, que tú recicles o no es indiferente. Por lo tanto, sí, se tiene que actuar en esta vía porque, al final, que dejemos o no de ir en coche, si este sistema no se detiene, no sirve para nada. Se necesita una masa crítica importante y eso pasa por concienciar a la población.
"Información es poder: si tienes información, piensas al respecto y si piensas al respecto, puedes hacer alguna cosa al respecto"
Ahora, por ejemplo, hago charlas en escuelas y los niños y niñas desconocen la situación. ¿Cómo puede ser que en las escuelas se enseñe la literatura de hace tres siglos y no tu futuro más inmediato? Es información pública, científica y demostrada, que nos afecta directamente y que no se sabe, que se ha escondido porque no interesa.
Después de manifestaciones por todo el mundo para reclamar acciones para combatir la emergencia climática, este viernes habéis convocado la huelga mundial por el clima en Barcelona. ¿Por qué tenemos que asistir?
Porque nos afecta a todos. Indiferentemente de quién seas y de dónde vivas. Primero afectará a las clases sociales bajas, que es otra de las desigualdades. Seas hombre, mujer, hijo, hija, niño, niña, todo el mundo puede manifestarse y tiene que manifestarse, porque, ahora mismo, no tenemos un futuro, ni tú, ni tu primo, ni tu hermano, ni nadie, por lo tanto, ven y ayúdanos porque solos no lo podemos hacer.
¿Cuál será el lema que encabezará la manifestación?
Ahora mismo el lema es "Justicia climática", una mirada holística a una solución que dé justicia no sólo a la emergencia climática, sino también a la naturaleza, a las especies, a los países que más les afecta, a todo lo que ha dañado el ser humano.