La fiscalía de Barcelona ha pedido a un juzgado de Barcelona que compruebe si el Ayuntamiento de la ciudad, liderado por Xavier García Albiol, ofrecerá alternativas para realojar a las personas que fueron desalojadas del antiguo instituto B9, que ocupaban ilegalmente desde hace meses. Según ha avanzado 3CatInfo, el Ministerio Público quiere asegurarse de que el consistorio cumple con la instrucción del juzgado que autorizó el desalojo siempre que se atendiera a las personas expulsadas. Concretamente, la magistrada del juzgado de lo contencioso-administrativo 11 de Barcelona autorizó al Ayuntamiento de Badalona al desalojo de los ocupantes del instituto B9 y a recuperar el inmueble. Además, la jueza ordenaba que “el desalojo de eventuales personas ocupantes se lleve a cabo siguiendo el protocolo de asistencia para las personas sin techo de los servicios municipales a efectos de prestarles la atención del programa de atención social, remitiendo informe de lo actuado”, según la resolución dictada el pasado 4 de diciembre, a la que tuvo acceso ElNacional.cat.

Según confirmaron fuentes de la Fiscalía a ElNacional.cat, el Ministerio Fiscal pidió al juzgado que requiera "de forma urgente" al ayuntamiento un informe sobre las "incidencias en fecha 17-12-2025 y subsecuentes con motivo del desalojo" y de si está cumpliendo "en el mandato del juzgado relativo a que los servicios municipales presenten la atención adecuada a las personas sin techo, así como las previsiones de procurar pronto un recurso habitacional a las personas que desde hace más de cinco días permanecen en la calle".

Cinco días en la calle

Desde que el antiguo instituto B9 fue desalojado el pasado 17 de septiembre, el alcalde de la ciudad, el popular Xavier García Albiol, ha reiterado que no quiere a estas personas en su ciudad y ha dejado claro que no movilizaría recursos municipales para dar acogida alternativa al grueso de migrantes que se quedaban sin un techo. De hecho, el pasado lunes mantuvo varias reuniones con vecinos de la zona, y en una de ellas dijo que "tenemos que centrarnos en el objetivo de echarlos. Entonces, podremos trabajar", indicó a los vecinos, según ha informado La Directa.

Un numeroso grupo de desalojados se encuentra alojado en tiendas de campaña bajo el puente de la autopista C-31, a donde se dirigieron este pasado fin de semana para protegerse de las lluvias. Las entidades sociales y también algunos vecinos solidarizados con su situación les han traído comida, agua y mantas. El fin de semana, un acuerdo entre administraciones y entidades sociales posibilitó la atención a una quincena de los desalojados en la parroquia de la Virgen de Montserrat, en el barrio de Sant Crist, pero decenas de vecinos lo impidieron. Paralelamente, una quincena de los inmigrantes desalojados del B9 han dormido en las últimas noches en el antiguo albergue Can Bonfí Vell, aunque están a la espera de un posible traslado a otros centros. Por otra parte, la Guardia Urbana badalonesa ha desplegado un dispositivo policial para impedir que un tercer grupo buscara refugio en el instituto Ventura Gassol, situado en el barrio de Montigalà.