Un estudio de la Universidad de Newcastle en Australia ha revelado que consumimos cinco gramos de partículas microscópicas de plástico a la semana, lo que equivale en peso a una tarjeta de crédito. La mayoría de ellas las ingerimos del agua del grifo y la embotellada, aunque los investigadores también encontraron importantes trozos invisibles de polímero dentro de alimentos como el marisco, la cerveza y la sal. 

En total, esto supone el consumo de unos 250 gramos al año y se augura que la cifra aumente en los próximos años. La producción desenfrenada de este hará que, por ejemplo, según apunta el informe, dentro de seis años, el océano contendrá una tonelada métrica de plástico por cada tres toneladas métricas de pescado.

En las últimas dos décadas, el mundo ha producido la misma cantidad de plástico que lo fabricado en total desde el principio de la historia. Además, se estima que la industria crecerá un 4% anual hasta 2025, y más del 75% de estos terminaran como residuos.