La manifestación de estudiantes en Barcelona para reclamar una rebaja de las tasas universitarias y equiparar los precios de grados y master ha acabado con una sentada de más de un centenar de personas delante de la Secretaría de Universidades que ha obligado a cortar la Vía Layetana durante más de cuatro horas.

Hacia las 12 y media de la madrugada, los Mossos d'Esquadra, con un fuerte despliegue, han desalojado una en una las personas que participaban en la sentada, que había quedado rodeada por el cordón policial en que custodiaba la sede de Universidades y bloqueaba el acceso a la Vía Layetana. Desde fuera del cordón, decenas de personas han dado apoyo a los concentrados con gritos que animaban a la "resistencia" y contra la policía.

La manifestación, convocada por las asambleas de facultades y con el apoyo del Sindicato de Estudiantes de los Países Catalanes (SEPC) y la Asociación de Estudiantes Progresistas (AEP), había salido de plaza Universitat pasadas las 7 de la tarde, con la cabecera 'Bajemos las tasas'; una protesta que ha culminado dos días de huelga en la Universidad Autónoma de Barcelona, a la cual este jueves se han sumado facultades de la Universidad de Barcelona (UB). La marcha se ha dirigido por la calle de Pelai hacia Vía Layetana sin incidentes y, según la Guardia Urbana de Barcelona, en el momento álgido, han sido unas 800 personas las que han participado.

Petardos y bombas de humo

La Secretaría de Universidades e Investigación (SUR), que se encuentra al inicio de la Vía Layetana, estaba custodiada por los Mossos antes de la llegada de los estudiantes, que han lanzado algunos petardos y bombas de humo en el edificio. Ha sido entonces cuando unos 200 participantes a la manifestación se han asentado delante de Universitats y han anunciado, con cánticos, que pensaban pasar la noche allí. También han gritado contra los recortes en enseñanza, contra la policía y han pedido la dimisión del secretario de Universidades, Arcadi Navarro, entre otras proclamas y reivindicaciones.

Se han vivido algunos momentos de tensión cuando los manifestantes de primera línea han dado algunas veces, con los palos de las banderas que llevaban, en los escudos de los agentes que custodiaban la puerta de la Secretaria d'Universitats.

Los Mossos han dado algún golpe de porra, pero el enfrentamiento se ha frenado. En general, la sentada ha transcurrido de forma pacífica. Los manifestantes han desplegado tres tiendas de campaña y las personas que se encontraban fuera del cordón policiales dándoles apoyo –muchas eran manifestantes que se habían alejado un momento de la sentada y ya no las habían dejar volver a entrar dentro del cordón policial – los han lanzado provisiones, como snacks, barras de pan, embarriles y bebidas.

Desalojo

Cuando ya hacía cuatro horas que había empezado la sentada, los Mossos han anunciado que tenían instrucciones de liberar la vía y, pocos minutos después, lo han empezado a desalojar. Los Mossos han optado por separar uno a uno los participantes a la protesta, que se habían apiñado para hacer más complicado el desalojo. A medida que los iban separando del grupo, los llevaban|traían a la calle Pla de Palau.

Algunos de los participantes a la sentada han explicado a la ACN que no los habían identificado. Las diputadas de la CUP Mireia Vehí y Mireia Boya han estado presentes en la protesta, aunque se han mantenido en segunda línea, observando cómo transcurrían los hechos. Al final se ha añadido la diputada de la CUP Eulàlia Reguant, que ha pedido información a los Mossos de que pasaba con los participantes a la sentada una vez desalojados.

Según le habrían explicado, los agentes no estaban identificando a los manifestantes, excepto los de primera línea que habían sido con las banderas. Estos, se los habría llevado a los furgones para comprobar si tenían algún requerimiento y, en caso negativo, también se los dejaba marcharse, según le habrían indicado a Reguant.

Equiparar precios

Al inicio de la manifestación, la portavoz del SEPC, Mercè Terés, había destacado que los motivos de la protesta eran reclamar la rebaja efectiva del 30% de las tasas universitarias y que los precios de grados y master se equipararan. Terés también ha denunciado delante de los periodistas la detención el lunes pasado de tres personas relacionadas con los disturbios de la manifestación del 2 de marzo y lo ha atribuido a la voluntad de "desarticular el movimiento estudiantil".

La Secretaría de Universidades e Investigación ha aprobado la rebaja del 30% de las tasas universitarias a las rentas más bajas, tal como confirmó Arcadi Navarro en una entrevista a la ACN. Esta rebaja afecta concretamente a las familias incluidas en los umbrales 1 y 2 establecidos a las becas equidad y por lo tanto, a las familias de cuatro miembros que no superen los 42.554 de renta anual. Esta modificación de los precios públicos para estos estudiantes cumple la enmienda de la ley de acompañamiento de presupuestos y también incluye la extención de las becas equidad en los master. Para los manifestantes, sin embargo, esta rebaja no es suficiente.