El operario herido ayer al producirse una deflagración en una gasolinera de Sant Sadurní d'Anoia continúa en estado crítico, con quemaduras de segundo grado en el 45 por ciento de su cuerpo y problemas respiratorios por inhalación de gases tóxicos. Según ha informado a Efe un portavoz del hospital Vall d'Hebron de Barcelona, el herido se encuentra en el servicio de cuidados intensivos de la unidad de quemados de este centro sanitario.

Un operario de 43 años murió y su compañero de 27 fue rescatado en estado muy grave después de una deflagración que se produjo ayer por la tarde en una gasolinera de Sant Sadurní d'Anoia cuando estaban llevando a cabo tareas de mantenimiento de la instalación.

La deflagración ocurrió hacia las 15.15 horas por causas que se están investigando, y provocó un pequeño incendio con una intensa humareda que fue controlado rápidamente por los Bombers de la Generalitat. Las víctimas son dos operarios de una empresa externa de mantenimiento de la gasolinera que estaban trabajando dentro de un depósito subterráneo cuando se produjo el siniestro.

En un principio, se pensó que los dos trabajadores habían muerto ya que ninguno de ellos daba señales de vida ni contestaba a los llamamientos de los sanitarios, según han informado los Bombers de la Generalitat, que movilizaron equipos del cuerpo especializado GRAE, que llegaron a la gasolinera en un helicóptero, para el rescate.

No obstante, estos equipos especializados de los Bombers consiguieron finalmente rescatar con vida a uno de los dos operarios, que fue trasladado en estado muy grave al Hospital Vall d'Hebron de Barcelona. El otro operario, un vecino de València de 43 años, según indicaron los Mossos, fue evacuado ya cadáver.