El conductor del vehículo de matrícula francesa que impactó este sábado contra otro vehículo en la N-II, a la altura de Pont de Molins, cerca de Figueres, y que provocó la muerte de siete personas y un herido grave, tenía el carnet retirado desde diciembre del año pasado y antecedentes policiales por conducir bajo los efectos del alcohol y otras infracciones relacionadas con la conducción.

Así lo ha explicado el conseller d'Interior, Jordi Jané, que también ha dicho que los jóvenes del coche francés, que tenían entre 19 y 22 años, llevaban 6.570 euros en efectivo y dos botellas de vodka dentro del vehículo. Los motivos del accidente todavía se están investigando pero lo que ha podido confirmar el conseller es que el vehículo iba a una velocidad muy superior a la permitida.

En rueda de prensa desde Figueres, Jané ha señalado que los cinco ocupantes de este vehículo eran de nacionalidad francesa y vecinos de Perpinyà, Carcasona y Tolosa de Languedoc.