Agentes de la jefatura de información de la Guardia Civil, junto con unidades de la comandancia de Las Palmas de Gran Canaria, bajo la dirección del juzgado central de instrucción n.º 5 y la Fiscalía de la Audiencia Nacional, han detenido en el aeropuerto internacional Adolfo Suárez Madrid-Barajas a un ciudadano español de origen palestino con residencia en Vecindario (Las Palmas) por su vinculación con el grupo terrorista Daesh.

La Guardia Civil mantenía abierta desde el 2014 una investigación sobre esta persona en relación con sus actividades a favor del Daesh. A través de ella, los investigadores pudieron constatar como el detenido había experimentado un proceso de radicalización a través del consumo reiterado de propaganda de dicho grupo terrorista, que desembocó finalmente en la voluntad de viajar para tratar de enrolarse en las filas de dicho grupo.

Viaje a Turquía

Ya en el pasado mes de julio, el detenido realizó un viaje vía Turquía, donde parece que fue detenido por las autoridades turcas en las proximidades de la frontera turco-siria y fue devuelto a España. Tras este primer intento y la especial vigilancia a la que fue sometido por los especialistas del servicio de información de la Guardia Civil, se pudo observar cómo en el mes de noviembre volvió a salir de territorio nacional para, esta vez, dirigirse a Jordania, país fronterizo con Siria.

Tras la activación de un dispositivo específico por la Guardia Civil, en coordinación con las autoridades jordanas, se procedió a interceptar al detenido y tratar de obtener nuevos elementos probatorios sobre la verdadera naturaleza de su viaje, tras lo que fue entregado a la Guardia Civil para su puesta a disposición judicial en España.

Reconstruir movimientos

Los investigadores tratan ahora de reconstruir todos los movimientos que el detenido ha realizado para preparar estos viajes, con el registro de su domicilio en Vecindario, entre otras cosas, con el que se espera obtener elementos que permitan esclarecer los hechos objeto de la investigación y especialmente descubrir la posible existencia de otras personas que pudieran haber facilitado la radicalización y los desplazamientos del detenido.

Desde la elevación al nivel 4 de alerta antiterrorista el 26 de junio del 2015, la Guardia Civil ha reforzado todos los dispositivos operativos y líneas de investigación relativas a la amenaza terrorista, especialmente aquellas sobre individuos inmersos en un proceso de radicalización que pueda terminar con el desplazamiento de esta persona en zona de conflicto o en la comisión de acciones terroristas en los países de residencia, lo que supone en la actualidad una de las principales amenazas sobre los países occidentales. En todo este tiempo las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado han detenido a un total de 163 terroristas yihadistas.