Un nuevo caso de sarna ha obligado a cerrar la sala de espera de la comisaría de los Mossos d'Esquadra del Eixample. El brote ha sido detectado este miércoles en un menor migrante que pasaba la noche en el edificio situado en la plaza de España acompañado de cuatro compañeros más, que estaban a la espera de ser identificados con el fin de que laDirecció General d'Atenció a la Infància i l'Adolescència (DGAIA) se hiciera cargo.

El agente encargado de custodiar a los jóvenes ha dado la voz de alarma al ver un sarpullido que tenía el menor infectado y entonces se ha procedido a aplicar el protocolo policial especial para este tipo de casos. Tanto la sala donde pernoctaba el joven infectado como sus compañeros han sido aislados a la espera de poder desinfectar el espacio y comprobar que ninguno de los menores ha contraído la enfermedad.

Este es el segundo brote de sarna detectado en una comisaría. El primer caso se dio en la sede de los Mossos en Ciutat Vella el pasado 11 de octubre, cuando la presencia de un menor infectado obligó a aislar y desinfectar la sala de espera donde este dormía con seis compañeros. Los jóvenes fueron atendidos en el centro de urgencias de atención primaria (CUAP) de Ciutat Vella-Peracamps y el resto de menores que llegaron durante el periodo que el espacio estuvo cerrado fueron trasladados y repartidos entre las comisarías próximas y las dependencias de la DGAIA, en el Poble Sec.