Siguen las remodelaciones en la estructura de la Policía de Catalunya. Después de la destitución del major Trapero como efe del cuerpo y de los cambios a todo el Estado Mayor de los Mossos d'Esquadra que se hicieron después de Navidad, siguen, en cascada, cambios en posiciones de poder y control que había articulado hasta el pasado mes de diciembre jefe del cuerpo. ElNacional.cat ha podido saber que se ha destituido el jefe de Protocolo de Mossos, el subinspector Jordi Venys, que después de ser informado de que la Dirección General de la Policía no contaba con él por este cargo y que sería sustituido, ha decidido coger la segunda actividad. El subinspector Toni Santervas será quien asumirá desde ahora esta oficina situada en la cuarta planta de la comisaría de las Corts, donde está la sede de la DGP y las diversas comisarías y divisiones que dependen del director general Pere Ferrer: la Comisaría General de Relaciones Institucionales, Prevención y Mediación (CGRIP) y también la División de Asuntos Internos (DAI) y la División de Evaluación de Servicios (DAS); esta última, donde se ha recolocado Josep Lluís Trapero después de negociar con Interior su vuelta al trabajo.

El subinspector Jordi Venys es uno de los mandos próximos a Josep Lluís Trapero, forma parte del núcleo duro que han rodeado y protegido con mano de hierro la figura del major, cuando estaba pendiente de juicio, cuando fue absuelto y cuando volvió a mandar en los Mossos d'Esquadra. Con esta destitución, el major queda más solo a Les Corts, donde ve como a poco en poco, la Prefectura y la Dirección General de la Policía le están deshilachando su guardia pretoriana.

Otro miembro del núcleo duro de Trapero a segunda actividad

Venys seguirá el camino del comisario Juan Carlos Molinero, también próximo al major y miembro de la Prefectura durante el mandato de Trapero: pasar a la reserva. Lo que es lo mismo, a Mossos, pasar a segunda actividad.

Es una de las prebendas que tienen los funcionarios del cuerpo de los Mossos d'Esquadra cuando llegan a una edad concreta, que pueden solicitar a la administración ser apartados del servicio, dejando de tener cualquier responsabilidad operativa, pero siguiendo vinculados a la casa, cobrando el 100% de su sueldo. El cuerpo destina los agentes y mandos en segunda actividad a dar apoyo, no operativo, a unidades del cuerpo. Todavía no está claro cuál será el destino que asumirá ahora Venys.

En el caso de Molinero, por ejemplo, después de saber que la Prefectura no contaba con él, pidió pasar a segunda actividad y presidir el Club Esportiu de los Mossos. Otros escuderos de Trapero han sido enviados a otras posiciones, como el intendente Toni Rodríguez que ha asumido la comisaría de Rubí, o el comisario Esquius, que lidera ahora la Región Policial Metropolitana Sur a petición propia, aunque hubiera podido coger ya la segunda actividad por edad.

Más relevos a la vista

Fuentes no oficiales de la policía catalana han confirmado a ElNacional.cat este cambio al frente de Protocolo de los Mossos d'Esquadra y han explicado que forma parte de todo el relevo generacional y de concepción de liderazgo que está llevando a la práctica la nueva Prefectura y la Dirección General de la Policía.

El relevo se enmarca en los cambios que ya se anunciaron a principios de año en varias áreas y unidades de la policía catalana y que seguirá, durante los próximos meses, después de las promociones internas de mandos. Estos cambios, cuando la Prefectura tenga nuevos inspectores, intendentes y comisarios, afectarán espacios de poder como la dirección de la Brigada Móvil, que el actual binomio al mando, Estela-Sallent, quieren cambiar dentro de poco tiempo.

 

Foto principal: Trapero saludando a algunos de sus mandos, en una imagen de archivo / Sergi Alcàzar