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La Cumbre del Clima de Naciones Unidas llega este miércoles a su décima jornada, con los equipos negociadores intensificando esfuerzos, cuando apenas quedan tres días para la clausura de la reunión, prevista para el día 13, y con el anuncio de una nueva comparecencia de la joven activista sueca Greta Thunberg.

Un día después de la inauguración del "segmento de alto nivel", en la que intervino el cantante y compositor español Alejandro Sanz, ministros y jefes de las casi 200 delegaciones presentes continuarán sus intervenciones ante el pleno de la COP, en la que destacan las buenas intenciones, que contrastan con los lentos avances de los delegados.

Una lista que arrancará este miércoles con el ministro de Medio Ambiente de Portugal, Joao Pedro Matos Fernández, y concluirá con el director general de Ministerio de Adaptación al Cambio Climático, Meteorología y Geopeligros, Energía, Medio Ambiente y Gestión de Desastres de Vanuatu, Esline Garaebiti Bule.

Para agilizar las negociaciones, que avanzan a trompicones -como viene siendo habitual en los veinticinco años de las cumbres-, la Presidencia chilena de la COP25 nombró este martes a varios ministros, entre ellos la española Teresa Ribera, como "facilitadores". Quizá por eso, uno de los temas de la jornada será la "resiliencia", al que se añaden biodiversidad y economía circular, ambos elementos clave en la lucha contra la crisis climática.

También para el liderazgo y en la COP25 de Madrid se prevé que resuenen los ecos de la presentación en Bruselas del nuevo acuerdo verde de la Unión Europea, el plan de la UE para alcanzar la neutralidad climática de carbono en 2050.

El Pacto Verde Europeo que dará a conocer este miércoles en Bruselas la nueva presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, propone convertir a la UE en el primer continente neutro en emisiones de carbono en 2050 y elevar del 40% al 55% su meta de reducción de emisiones para 2030 con respecto al nivel de 1990.

En paralelo, en la COP se hablará de bioenergía, agua y maderas tropicales, pero también de digitalización y cambio climático, desinformación, noticias falsas y negacionismo de susodicho cambio, además de la financiación de las energías renovables.