Si vives en la zona del Ebre este domingo recibiste un aviso de Protecció Civil alertando de las fuertes lluvias que están afectando la zona sur del Principat este lunes, y que han obligado a suspender clases en las comarcas del Montsià y el Baix Ebre. Si vives en otros puntos del país las recibiste en julio, también por un episodio de lluvias o durante las múltiples pruebas que se han hecho en los últimos meses para intentar afinarlas. Pero, ¿cómo se envían y cómo funciona este sistema de alertas ES-Alert de Protecció Civil? A diferencia del teléfono de emergencias 112, al cual se puede llamar si hay cobertura de cualquier compañía aunque no sea la que tenemos contratada, el ES-Alert —que proporciona el Estado a las diferentes organizaciones de Protecció Civil— funciona solo si tenemos cobertura de nuestra compañía. Cuando se hace el envío desde el centro de coordinación de Protecció Civil, es necesario que la zona seleccionada tenga cobertura de la compañía contratada para que te llegue la alerta. Los técnicos seleccionan la zona y las antenas repetidoras que hay dentro, que lo envían a todos los móviles que reciben cobertura. Por eso se suele hacer una selección de antenas por exceso, ya que los límites de la zona donde se quiere enviar no coincidirán probablemente con las zonas de cobertura exactas de todas las compañías y, por el mismo motivo, es necesario que los mensajes sean muy claros, sabiendo a quién se dirigen por si también llegan a personas que no deben hacer caso.

¿Pero cuándo se envían?

Protecció Civil enviará mensajes de alerta a los móviles con la herramienta ES-Alert cuando en inundaciones haya avisos de peligro 5/6 o 6/6 del Servei Meteorològic de Catalunya (SMC), o cuando haya riesgo hidrológico de los gestores de cuenca que implique riesgo de afectaciones graves por desbordamiento o inundación, y siempre que haya riesgo para las personas. Desde su estreno en Catalunya en noviembre de 2022, el sistema de alertas masivas ES-Alert ha registrado un total de 123 envíos. La mayor parte de estos mensajes se han activado por incendios forestales (57), seguidos de las inundaciones (21) y los accidentes químicos (8), mientras que 37 se han hecho en el marco de pruebas y simulacros. El primer aviso se hizo en Tarragona en una prueba de seguridad química, y a partir de 2023 el sistema se extendió a todo el territorio, con 29 envíos aquel año y 36 más en 2024. Este 2025 el ritmo se ha acelerado con 57 activaciones hasta el momento, de las cuales 35 han estado vinculadas a fuegos forestales, 7 a inundaciones y 2 a emergencias químicas, además de 13 simulacros.

El envío es inmediato y de alcance masivo, según explican los técnicos de Protecció Civil. La aplicación envía mensajes emergentes a todos los móviles que se encuentran dentro de la zona afectada por una emergencia grave. El sistema utiliza la tecnología cell broadcast, que garantiza que el mensaje llegue en pocos segundos y a toda la población del territorio afectado, sin necesidad de tener aplicaciones instaladas ni de estar registrado en ningún servicio. El sistema es anónimo y no recoge ningún dato: simplemente se envía a los móviles que se encuentran en un área seleccionando las antenas que les dan cobertura. Cada compañía lo envía a los móviles a los que da servicio a través de las antenas seleccionadas. Los mensajes permiten dar instrucciones claras e inmediatas y complementan otros mecanismos de aviso como las sirenas (de riesgo químico o de rotura de presa), los medios de comunicación y las redes sociales. Desde Protecció Civil celebran la implementación y la buena capacidad de estas alertas pero, al mismo tiempo, también saben que no llegan a todo el mundo —un 80% llegan, según datos recogidos—, aunque la gente comparte los mensajes y creen que llegan a mucha más gente. Los técnicos de Protecció Civil entienden las alertas en los móviles como una capa más de comunicación en un episodio de emergencias.