Los Mossos d'Esquadra han detenido a un camionero en el Montsià que circulaba con una tasa de alcoholemia cinco veces superior a la permitida. Lo detuvieron en la N-340, en Amposta, pero la policía le iba a la carrera desde les Cases d'Alcanar.
La policía recibió el aviso de que un camión conducía temerariamente alrededor de las 17:45 horas. Inmediatamente se montó un dispositivo policial con el fin de localizar y parar al vehículo infractor. Poco después, una dotación policial localizó el camión, a su paso por Sant Carles de la Ràpita, pero el conductor no hizo caso de las indicaciones de los agentes con el fin de detenerse.
La dotación de los mossos, con las luces prioritarias y señales acústicas encendidas, lo siguieron y observaron como circulaba zigzagueando, invadiendo el sentido contrario y frenando de repente sin un motivo aparente. Durante la persecución los mossos tuvieron que hacer varias maniobras evasivas, apartándose en el arcén, con el fin de evitar chocar. Durante el trayecto el camión puso en grave riesgo al resto de usuarios y en la propia patrulla, ya que en aquella franja horaria había un tráfico intenso.
Después de conseguir pararlo a la altura de Amposta, los agentes comprobaron que el conductor presentaba síntomas evidentes de encontrarse bajo los efectos del alcohol. Al someterse a la prueba, dio un resultado positivo de 0,81 mg/l, cinco veces más del máximo permitido.
Finalmente, se activó el servicio de Bombers de la Generalitat con el fin de apartar el vehículo, ya que había quedado en un carril de desaceleración de la N-340, y lo trasladó hasta el Polígon Oriola, en Amposta, donde quedó inmovilizado.
El detenido ya ha declarado esta mañana en los juzgados de Amposta y el juez ha decretado su libertad con cargos. Es un hombre de 55 años de edad, de nacionalidad española y con domicilio desconocido. Lo acusan de un delito contra la seguridad vial por conducir bajo los efectos del alcohol y por conducción temeraria.
Es el segundo camionero detenido por conducir bebido. El sábado los Mossos detectaron otro en la AP-7 en Maçanet de la Selva que superaba ocho veces la tasa de alcoholemia permitida.