Cambray quiere apagar el fuego. El conseller de Educació ha convocado un pleno extraordinario con el Consell Escolar para tratar de solucionar la crisis que ha provocado en la comunidad educativa el anuncio de modificación del calendario escolar. Según ha podido saber ElNacional.cat, la convocatoria de esta reunión por parte de Josep Gonzàlez-Cambray se ha producido esta misma tarde del miércoles. Llega después de que la comisión permanente del Consell Escolar haya enviado un comunicado a sus miembros en el cual se critica las maneras de hacer del Departament de Educació. A pesar de no entrar a valorar la cuestión de fondo -si ha sido un acierto o no adelantar el calendario-, sí que se insiste en que la conselleria tendría que haber consultado el órgano. "Se habría querido conocer las propuestas de cambio con suficiente antelación para hacer la pertinente reflexión", dice el texto.

El plenario extraordinario se producirá el lunes 21 de febrero a las cinco y media de la tarde; pero el Departamento todavía no ha concretado el lugar. Cambray tiene ahora el objetivo de rehacer puentes con este órgano consultivo. De hecho, el texto remitido por la comisión permanente, en el cual también ha tenido acceso este diario, dice que ahora hay que rehacer los vínculos de confianza necesarios con la Conselleria de Educació. Hay que recordar que la ley obliga al Departament a consultar cualquier cambio relevante con este órgano, aunque sus valoraciones no sean vinculantes. Eso es lo que ha irritado a los miembros del Consell. De hecho, fuentes de este órgano aseguran que Cambray ha convocado esta reunión para ahorrarse una "humillación": que un tercio de sus miembros se avanzara a convocar un encuentro con el conseller ante la "indignación" que ha provocado el anuncio.

El argumento de Cambray sobre su silencio con el Consell Escolar ha sido que el CEC ya había opinado sobre esta cuestión con anterioridad. Eso, de hecho, es cierto. Y el conseller tiene un argumento a favor, y es que el órgano ya había visto con buenos ojos modificar el calendario escolar de una manera que recortara días de vacaciones. Ahora bien, en el comunicado de la comisión permanente del CEC se asegura de que el anuncio por parte de Educació no llega en un buen momento: "desde hace casi dos años los centros se han adaptado a una situación de pandemia, afrontan importantes cambios curriculares, el necesario impulso del uso de la lengua catalana a la educación, y la importancia de hacer sostenibles en estos momentos los cambios en el mundo de la educación". "La comunidad educativa de los centros necesita tiempo para reflexionar y planificar", añade el texto.

Los sindicatos convocan una concentración para pedir la dimisión

Por otra parte, los sindicatos USTEC, CCOO, Intersindical-CSC, ASPEPC y UGT han convocado una concentración a las puertas del Departament de Educació este jueves a las 11 de la mañana para protestar contra "la negativa a no retirar del orden del día el punto del calendario escolar y no respetar la propuesta de puntos pedidos unitariamente". Se trata de una reunión que tenía que tener lugar este jueves. Pero delante de este escenario, los sindicatos convocantes han decidido "plantar el departamento y pedir la dimisión del conseller".