El calentamiento de los mares podría llevar a un 17% menos de biomasa de especies marinas a nivel global a final de siglo, según asegura un estudio internacional en el que han participado investigadores del Consell Superior d'Investigacions Científiques (CSIC) y de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB). El trabajo, publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences y firmado por un grupo internacional de 35 investigadores de 12 países y cuatro continentes, ha evaluado los efectos del cambio climático a nivel global en el océano utilizando una combinación de múltiples modelos climáticos y de ecosistemas.

Entre los investigadores se encuentran tres expertos españoles: Manuel Barange, director de la División de Políticas y Recursos de Pesca y Acuicultura (FIA) de la FAO; Marta Coll, científica experta en la modelización de los ecosistemas marinos del Instituto de Ciencias del Mar (ICM) del CSIC; y Jose A. Fernandes, experto en Big data e inteligencia artificial de AZTI. También ha participado Eric D. Galbraith, matemático del Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).

Este estudio revela que la biomasa animal marina global, es decir, el peso total de animales marinos como peces, invertebrados y mamíferos marinos en el océano, disminuirá en todos los escenarios de emisión, a consecuencia, en gran medida, del aumento de la temperatura y la disminución de la producción primaria.

El alcance de las pérdidas proyectadas puede verse limitado si se reducen las emisiones: la disminución de la biomasa sería "solo" de un 5% en un escenario de mitigación fuerte, pero podría llegar a un 17% si la velocidad de emisiones no baja para finales del siglo XXI. En particular, la magnitud de este efecto del cambio climático se predice como similar en un océano con y sin presión pesquera, que de reducirse puede mitigar parcialmente esos descensos.

"La reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero sin duda ayudará a salvaguardar la vida marina en la medida de lo posible contra nuevas pérdidas", ha explicado la autora principal, Heike Lotze, de la Universidad de Dalhousie en Halifax, Canadá.

El análisis también sugiere que los impactos del cambio climático podrían ser más graves en niveles más altos de la red alimentaria, lo que significa que la biomasa de peces y mamíferos marinos podría sufrir disminuciones mayores en comparación con el fitoplancton.