Los Mossos d'Esquadra todavía no han podido interrogar al ladrón que robó el camión de butano ayer en Barcelona. Tan pronto como lo detuvieron, lo tuvieron que ingresar porque "tenía una sintomatología alterada. Era una persona inestable en aquel momento", según ha explicado el conseller de Interior, Jordi Jané.

Según el relato de Jané, el ladrón del camión de butano estuvo toda la noche de fiesta y gastó una gran cantidad de dinero. Todavía no han llegado los resultados de las pruebas de drogas y alcohol, pero el conseller observa que "la conducta de este personaje durante la noche es una conducta que nos hace pensar que estuvo de fiesta toda la noche en varios lugares acompañado a otras personas de nacionalidad sueca".

El ladrón, que está ingresado en una unidad psiquiátrica del Hospital del Mar, donde se le están haciendo pruebas, se pasó la noche de fiesta. Una noche larga con sexo, drogas y alcohol. Tiene antecedentes por maltratos, hurtos, conducción bajo los efectos de alcohol y otros delitos relacionados con las drogas.

El detenido llegó el día 20 en Barcelona con un vuelo desde Moscú. El día 19 había cogido otro vuelo a Copenhagen. Viajaba acompañado de un amigo y, aunque el mismo día 20, se tenía que irse a Madrid –se ha encontrado el billete de avión en el hotel– decidió quedarse en Barcelona.

Estuvo toda la noche sin dormir y ayer por la mañana primero intentó parar varios coches en Drassanes. Después intentó robar una moto –el propietario lo ha denunciado– y después robó el camión de butano.

Los Mossos le imputarán cinco delitos: hurto de uso de vehículo, atentado contra agentes de la autoridad, conducción temeraria, lesiones y daños.

Jané ha destacado: "Estábamos ante una actuación no planificada. Que cogiera y subiera a un camión de butano con las llaves puestas, es más un hecho accidental que un hecho planificado".