Bartomeu Muñoz, ex alcalde de Santa Coloma de Gramenet, está negando cualquier responsabilidad en los procesos urbanísticos. A preguntas de la Fiscalía, ha dicho que "hacía las funciones lógicas de un alcalde, que era dirigir los procesos políticos y apartarme de los procesos técnicos, que no eran de mi competencia ni tenía la preparación adecuada. Un alcalde dirige proyectos pero no ejecuta proyectos".

El ex alcalde de Santa Coloma de Gramenet ha respondido sólo al interrogatorio de la fiscal. La declaración continuará mañana, respondiendo a las preguntas de su abogado. Varios problemas técnicos han hecho finalmente aplazar la declaración a mañana, cuando tienen que declarar, también, los 8 acusados que faltan todavía por comparecer.

Durante la declaración, de tres horas aproximadamente, "Bartu" lo ha negado todo y se ha desmarcado de la operación Pallaresa: "Yo no me encargué de nada. Era alcalde de Santa Coloma en julio del 2002. La operación Pallaresa, era una venta de terreno sobre un concurso del 2001 cuando no era alcalde y mi misión era la de, simplemente, impulsar desde el Ayuntamiento la concreción de aquella operación inmobiliaria", ha dicho a preguntas del fiscal el ex alcalde de Santa Coloma de Gramenet. Bartomeu Muñoz sucedió en el cargo a la alcaldesa Manuela de Madre.

El exalcalde se enfrenta a una petición fiscal de 6 años y 10 meses de prisión y a una multa de 5,3 millones de euros por dos delitos de soborno cometidos en la adjudicación presuntamente irregular de tres parcelas en el municipio en el marco de la "operación Pallarés".

 

Muñoz, ha respondido altivamente, y con un cierto cinismo, a las preguntas de la fiscal: "Nunca he tenido ningún beneficio propio sobre ningún concurso público. Nunca he permitido ningún beneficio de nadie a costa del Ayuntamiento". Ha llegado a decir que no sabía lo que votaba a los plenos y que eso era normal: "Cuando se vota alguna cosa al pleno no necesariamente todo el mundo conoce lo que se vota. Votas aunque no conozcas lo que estás votando". De hecho, al principio de la declaración se ha mostrado como un auténtico desconocedor de los procesos urbanísticos y de los procesos administrativos, pero a lo largo de su declaración ha demostrado saber el detalle de toda la operación y de los trámites urbanísticos. Un hecho que le ha llamado la atención a la fiscal, que lo ha hecho constar en un momento de la declaración.

El ex alcalde de Santa Coloma ha dicho que no sabía que las empresas que solicitaron el cambio de usos del proyecto comercial, de viviendas y hotelero, se vendieron todas las acciones y la revalorización les supuso un beneficio de 12 millones de euros. También ha negado que él tuviera ganancias "ni antes, ni durante, ni después".

Muñoz, que es el primero de los acusados a declarar en el juicio, no ha querido responder a ninguna pregunta sobre las grabaciones telefónicas. En todas ellas aparece hablando con Luís Andrés Garcia, principal cabeza de la trama. Y en todas ellas citan a "Manolo", presumiblemente el concejal de urbanismo de la época, a Manuel Dobarco, y hablan de operaciones urbanísticas e intercambio de favores.

"Quiero que se arrodille a mis pies"

Las conversaciones telefónicas, que la defensa ha pedido que queden excluidas como prueba del juicio, contradicen la versión de Muñoz que se desmarca en todo momento de haber adjudicado a dedo y permitido modificaciones con beneficios para los propietarios.

En una de las llamadas que la fiscal ha hecho poner en el juicio se oye como Muñoz le dice a Luís Andrés Garcia que quiere el agradecimiento de Josep Singla, de la constructora Proinosa: "Quiero que se arrodille a mis pies". Y pide que Singla deje de hacer le llorica. "Menos llorar y más agradecimiento". Muñoz también advierte "Luigi" ante un viaje de Singla con otros empresarios y José Montilla, presidente de la Generalitat en aquel momento: "Vigila que no ponga la pata".

 

Sobre "Luigi"

"No es funcionario, no es cargo de confianza, no tiene ninguna relación contractual con el Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet", ha dicho Bartomeu Muñoz de la principal jefe de la trama con quien mantenía una estrecha relación desde 1975, según ha admitido él mismo en la declaración del juicio.

El ex alcalde se desmarca también de Luís Andrés Garcia, presunto jefe de la trama, de gestionar las operaciones urbanísticas desde dentro mismo del Ayuntamiento. El Ayuntamiento sólo lo dirigía el alcalde y sus concejales. En aquella época y espero que en todas las épocas", ha dicho Bartomeu Muñoz a preguntas de la Fiscal.

Bartu lo niega todo

El ex alcalde sólo ha pedido perdón por el trato de favor con algunas entidades del municipio. El resto, lo ha negado todo. También la adjudicación en dedo del empresa de limpieza de los equipamientos públicos Limasa.

La mejor oferta era de otra empresa pero en una llamada Bartomeu Muñoz dice "no tengo ganas de cambiar" a la técnica municipal que tiene que hacer el informe antes de la adjudicación. Y la técnica acaba haciendo el informe favorable a Limasa. La técnica Gemma Fernandez admite: "Estamos preparando el informe para que sea Limasa".

En otra conversación Bartomeu Muñoz le dice a Manuel Carrillo, de la empresa Limasa: "Mientras yo esté, no te preocupes. Me dijiste 'coi, Bartu, eso lo necesito', han sido muchos años y no tengo ganas de cambios".

Una de las llamadas muestra directamente como Muñoz pide tres cantidades de dinero, 2.100 euros, 1.980 y 2.400, el día antes de marcha de vacaciones, con prisas y pidiendo ser discreto y sin pasar por la oficina de los funcionarios, directamente a la alcaldía.