Un estudio ha dado a conocer que, entre el 2004 al 2012, el consumo del tabaco de liar ha registrado un aumento del 91% entre los fumadores, entre otros motivos, por la falsa creencia que es menos perjudicial y por tener un precio más asequible. Esta información que se desprende de un estudio liderado por el profesor Esteve Fernández, director del centro colaborador de la OMS para el control del tabaco del Institut Català d’Oncologia e investigador del ICO-Idibell.

Además, el estudio muestra que aunque el consumo de tabaco ha bajado poco, pasando del 26,6% al 24%, sí que han cambiado los hábitos de los fumadores ya que la compra de cigarrillos tradicionales ha caído del 89,1% al 71,8%, mientras que el tabaco de liar ha subido del 1,4% al 15,4%.

El estudio ha realizado encuestas en dos periodos de tiempos diferentes, los años 2004-2005 y el 2011-2012 a un total de 1.037 residentes en Barcelona y ha añadido que el tabaco de liar es más popular entre los fumadores masculinos y entre las personas de 16 a 44 años. El estudio también ha definido que los que fuman más tabaco de liar son personas con educación secundaria y universitaria.

Fuman menos

Tal como afirma la doctora Xisca Sureda, autora también del estudio, los usuarios de tabaco de liar "piensan que fuman menos cantidad y que este tipo de cigarrillo es menos perjudicial para la salud que el manufacturado".

No obstante, Sureda ha matizado que los datos del estudio confirman que no existe ninguna diferencia entre las concentraciones de nicotina en las muestras de saliva de los fumadores: "El tabaco de liar tiene la misma nicotina, alquitrán y monóxido de carbono que el tradicional, no hay ninguna diferencia".

El mismo precio

La encuesta también muestra como las políticas que regulan el precio del tabaco en España han afectado al tabaco tradicional, mientras que otros tipos, como el de liar, se han convertido en alternativas más económicas.

Por este motivo, Fernández ha reclamado "revisar los impuestos con la intención de equiparar el precio de los diferentes productos de tabaco", ya que el precio es la principal medida de control de tabaco, tal como ha expuesto.