¿Quién y cómo provoca los incendios en Catalunya?

Más de una cuarta parte de los incendios son intencionados. De los tres incendios importantes del verano pasado, Naut Aran (432 hectáreas), Artés (377 ha) y Tivenys (123 ha), el primero fue a causa de la quema de pastos y el segundo, intencionado sin motivo. El último lo provocó un rayo. Pero para saber la causa de cada uno de los fuegos que hay en Catalunya, detrás hay un trabajo de investigación que hacen los Agentes Rurales. Desde el momento que se declara el incendio, se activa ya un primer equipo que tiene que localizar y preservar la zona de origen del fuego. Son investigadores sobre el terreno. Buscan pruebas. Descifran los mensajes que les ha dejado el fuego y los indicios que los llevarán al causante del incendio.

"Investigamos de forma sistemática todos los incendios ―dice el inspector en jefe Toni Mur―. Eso ha dado un bagaje a todos los investigadores. No es lo mismo investigar un incendio al año que 50. Tratamos de atribuir una causa cierta a todos los incendios. Todos empiezan pequeños y se hacen grandes según el punto de inicio, el estado de la vegetación... a nivel estadístico, para nosotros todos son importantes". Se utiliza una técnica policial: "Tenemos que hacer una doble lectura para saber qué actividad hay en el área de inicio para relacionarla con la posible causa del incendio y después de que lo que se encuentre sobre el terreno lo confirme. Y validarlo con testigos", dice Mur.

En un incendio importante puede haber hasta 20 agentes rurales. Todos los agentes tienen una formación básica en investigación. "Para nosotros es muy importante que en la primera fase del incendio el trabajo se haga bien con respecto a la preservación de la zona de inicio y en la recopilación de testimonios", explica el inspector.

Los incendios pueden estar causados por causas naturales o provocados por negligencias o bien intencionadamente. Estos últimos son los que más difícil es de establecer la causa. "Sobre terreno quemado, no es fácil encontrar las pruebas. Muchas veces se queman", subraya Toni Mur.

"Hacer fuego es muy simple"

Hay 40 agentes mayores, especialistas en incendios forestales que tienen una formación avanzada en la investigación de causas, y algunos de ellos están especializados en temáticas concretas como las líneas eléctricas.

"Hacer fuego es muy simple. Provocar un incendio es muy simple y poder atribuir un incendio a una persona es muy complicado. O lo encuentras in fraganti o muchas veces los indicios para poder atribuir el fuego no son suficientes", lamenta Mur, que señala que en algunos casos ha hecho falta la repetición de más de un fuego para poder encontrar al autor.

agentes rurales - Carles Palacio

¡Fuego!

La llamada entra al 112, e igual que los Bomberos, los Agentes Rurales, reciben el aviso.

Los Agentes Rurales trabajan en dos líneas prioritarias: la investigación de las causas y la valoración y cartografía del incendio prácticamente en tiempo real.

Mientras el fuego está vivo, también se da apoyo a los bomberos dándoles información sobre el territorio, como el estado de las pistas, los caminos de acceso y junto con GRAF se hace llegar la información para establecer la mejor estrategia de extinción. También intervienen inmediatamente hasta que lleguen los Bomberos.

"Los primeros momentos del incendio facilitan mucho la investigación", dice Toni Mur, inspector jefe de los Agentes Rurales. "Una de las mayores dificultades es encontrar el origen", dice, por eso desde el primer momento que se detecta la columna de humo, el equipo de investigación se traslada al lugar, se hacen las fotografías de la columna y se buscan los testigos.

Una de las mayores dificultades es localizar el punto de inicio del incendio. "La primera parte de la investigación es determinar la zona donde se ha iniciado, y lo hacemos en base a la geometría del incendio, conociendo los datos meteorológicos que había al primer momento, y leyendo cuál ha sido la dirección del fuego a partir de las señales que deja en la vegetación". Y así el lugar de los hechos que se analiza puede llegar a tener de entre 20 a 200 metros cuadrados, sobre los cuales los Agentes Rurales buscarán todo tipo de pruebas.

Se hace una retrospección. como si rebobinaran la película, hasta llegar en la zona de inicio y aquí también se va atrás identificando cada una de las señales que ha dejado el fuego.

"¿Qué buscamos? Indicios de actividad humana y el medio de indicción", dice Mur.

investigación incendio Agentes Rurales - CARO

Sobre el terreno

Las piedras, la orientación de los matorrales quemados, los caracoles y otros bichos... todo puede ser un indicio para saber qué ha provocado el fuego.

En la zona cero del origen del fuego está Quico Rivera, jefe de Área Básica del Bages.

Cuando llegamos ya tiene puntos señalados.

"Lo primero que hacemos es mirar la geometría del incendio", dice. El dibujo del terreno quemado refleja cómo ha conducido el fuego el viento o la misma topografía del terreno. "En un terreno plano, el incendio siempre quema en redondo y cuando hay viento, el fuego va hacia la dirección que va el viento". Estamos ante un terreno quemado que hace forma de embudo. Se ve sin dudas hacia dónde ha ido el fuego: "Con esta geometría se ve claramente hacia donde ha llevado el fuego el viento y dónde es el punto de inicio del incendio".

agentes rurales estudio incendio - Carles Palacio

Buscar el punto de inicio

"Tenemos un incendio en un terreno plano, con combustible homogéneo, y la primera pista nos da la dirección del viento", explica Rivera. Esta es la diagnosis al llegar al punto de inicio.

Los agentes rurales empiezan a trabajar de fuera cabeza adentro, sin estropear ningún indicio. Los bomberos tampoco han pisado la zona y mucho menos han tirado agua, harían desaparecer las pruebas esenciales.

Los agentes marcan con las banderitas los indicadores del paso del fuego. "Nos dicen hacia dónde ha ido el fuego y nos llevan al origen", explica Quico Rivera. Son vestigios sutiles.

"Todo incendio deja un rastro"

Indicador 1: Las gramíneas. La gramínea quemada queda completamente tumbada hacia la dirección contraria al camino del fuego.

Indicador 2: Tronco. Está quemado por la parte de delante. La llama ha entrado por debajo.

Indicador 3: Las piedras: La marca que deja el fuego cuando pasa por encima las piedras. Se tiene que comprobar también que la piedra no se haya movido de lugar.

Indicador 4: El caracol: El caracol que encontramos tiene el caparazón agujereado. El principal calor le ha venido de delante y le ha roto la concha.

agentes rurales estudio incendio - Carles Palacio

La causa

Todas las pruebas se contrastan y así se determina la dirección del fuego y el punto de origen.

Se va limitando la zona hasta encontrar una colilla. Pero todavía no está todo resuelto, según Quico Rivera: "Cuando encontramos la colilla, tenemos que hacer la construcción de si realmente es la causa, mirando si coincide el sentido de la propagación".

"Si aquí no encontráramos la colilla, pero vemos claro que ha empezado, aquí tenemos que mirar los cuadros indicadores de actividades humanas. Qué actividades se pueden desarrollar aquí en la zona y pueden tener relación con el fuego. Si hay una línea eléctrica, un campo agrícola, un paso de gente... tendríamos que empezar a trabajar sobre estas hipótesis para ver qué ha podido ser. Y si no, traeríamos a Piris", detalla el agente.

Piris, el agente con el mejor olfato

Investigacio Te Pires Agentes Rurales incendio - CARO

Piris es el perro de los Agentes Rurales entrenado para encontrar sustancias acelerantes del fuego.

Cuando los Agentes Rurales ven que el patrón del incendio apunta a la intencionalidad, el perro confirma si se han utilizado acelerantes. "Piris lo acierta siempre", dice sonriendo Toni Mur.

"Tiene tantas ganas de jugar... porque él lo que busca es el premio, el juego, y este perro es capaz de pasarse jugando 5 horas y lo hace porque está loco por el juego", explica Mur.

Allí donde Piris marca una posible sustancia, se hace la comprobación con el draguer y se cogen las muestras del suelo que analiza el Instituto Nacional de Toxicología, que es quien determina la sustancia exacta. Si es alcohol, gasolina, gasóleo u otro tipo de producto. "Es el dato realmente importante que confirma que ha habido intencionalidad y si en algún momento encontráramos a un sospechoso que llevara encima este combustible, sería un indicio más", observa Mur.

El trabajo de Piris está validado por la fiscalía y el Instituto Nacional de Toxicología. Esta primavera el fiscal y los técnicos vieron cómo trabajaba el perro de los agentes rurales experto en encontrar sustancias acelerantes del fuego. De las cinco muestras de diferentes productos que se pusieron como cebo, Piris detectó cuatro, aun habiendo llovido la noche antes.

Los testigos

Nada más empezar el fuego, los Agentes Rurales localizan a la primera persona que ha visto el incendio. "El recuerdo es mucho más exacto en el mismo momento que al cabo de dos horas o tres días", detalla Toni Mur. El 112 proporciona los datos y en función de lo que se encuentra en la primera inspección se van incorporando los agentes especializados.

Los medios

Los últimos años la técnica en la investigación de incendios ha avanzado. "La fotografía aérea con los primeros momentos del incendio la incorporamos a la investigación porque ayuda a determinar el punto de inicio", explica Toni Mur. Y es que más allá de resolver las causas, hace falta hacer el informe pertinente que servirá para la investigación judicial y para derivar las responsabilidades civiles o penales.

Las cámaras térmicas también ayudan a encontrar elementos como el recalentamiento a causa de líneas eléctricas, ferrocarril o maquinaria. Los draguers ayudan a detectar los hidrocarburos volátiles para saber si se han utilizado acelerantes. Las muestras se llevan a analizar a la Universitat de Bellaterra o al Instituto Nacional de Toxicología, según el material.

Los Agentes Rurales cuentan también con drones que permiten tener la visión aérea y el estado de la vegetación para hacer una mejor tarea de prevención y refuerzan la primera intervención de los agentes rurales. Llevan las cámaras térmicas y permiten encontrar elementos de recalentamiento.

Según el caso, se utilizan otras herramientas como los imanes que sirven para detectar chatarra en casos donde el fuego puede haber sido provocado por una sierra radial.

Las líneas eléctricas

Además hay agentes mayores especializados en líneas eléctricas. De hecho, hay un decreto específico para prevenir este tipo de incendios. El Plan Alfa Nivel 2 anula que las líneas se vuelvan a remontar hasta tres veces en caso de cortocircuito, un hecho que incrementaba el riesgo del fuego. Actualmente con el nivel 2 se desconecta este automatismo.

"Hemos intentado buscar soluciones a medida en cada una de las causas que tenemos identificadas. Los que cuestan más son los intencionados y se trata de poner medios y tecnología para poder resolver los casos más eficientemente"

En el campo

Actualmente los Agentes Rurales, además, tienen pleno control de las quemas agrícolas. Y en función de la previsión del día, los campesinos reciben un aviso y suspenden inmediatamente la autorización pera hacer la quema. Esta medida, junto con la campaña de la siega, ha reducido en un 80% los fuegos agrícolas.

El año 2017 el 32% de las causas de los fuegos fueron por negligencias entre las que en las quemas agrícolas y de pastos. Actualmente son los mismos agentes rurales quien hacen las quemas controladas de pastos.

Son medidas para evitar los incendios, la herramienta más eficaz de prevención, de hecho. Saber la causa y la buena gestión del territorio son los principales valores para reducir el riesgo de fuegos forestales y agrícolas.

Aquí podéis consultar todas las causas de los incendios en Catalunya del 2017.