Momodou Camara se ha pasado más dos años acusado por unos hechos de lo que cometió porque un traficante detenido en Lloret de Mar (Selva) dio a la Policía Local un nombre que se parecía en el suyo. El detenido iba indocumentado y los agentes sacaron adelante el caso con los datos que el Ayuntamiento les envió del padrón municipal. Pero el nombre que les dieron no era el del arrestado, sino el de un vecino –Momodou- que no tenía nada que ver con el caso.

Los hechos se remontan 13 de septiembre del 2015. Un hombre llevaba droga envuelta con papel de aluminio y la policía se lo llevó detenido en comisaría, donde se le cogieron las huellas dactilares. El detenido iba indocumentado –dijo que tenía los papeles en casa- y cuando le preguntaron cómo se llamaba, respondió: "Mamadou Lamin Camara".

Entonces, los agentes preguntaron al Ayuntamiento de Lloret si en el municipio había algún vecino con este nombre. El consistorio les respondió que en el padrón constaba un hombre que se llamaba Momodou Camara, y envió una copia de su pasaporte a la Policía Local. Momodou Camara, pocos meses después, recibió un escrito del Juzgado de Instrucción 6 de Blanes notificándole formalmente que se lo investigaba por un delito contra la salud pública.

Ahora, dos años después, este gambiano de 47 años ha podido demostrar su inocencia porque la policía ha comprobado que las huellas dactilares del detenido no coincidían en nada con las suyas. Momodou lamenta que por el camino ha perdido amigos, que ha habido familiares que no se lo creían y que, incluso, ha tenido que irse a vivir en el área de Barcelona. Su abogada, Anna Pagès, se plantea demandar al Ayuntamiento de Lloret de Mar por negligencia.