Un joven de nacionalidad española sería la víctima mortal del descarrilamiento de este martes en Vacarisses. Según Protección Civil, el hombre es un vecino de Castellbell i el Vilar, una población próxima a Manresa por donde pasa una de las líneas de Rodalies. Las primeras indagaciones de los Mossos d'Esquadra y el testimonio de algunos pasajeros apuntan a que el muerto -que viajaba de pie- habría salido disparado del vagón a causa del descarrilamiento.

El accidente se ha producido poco antes de las seis y media de la mañana, cuando un tren de la R4 de Rodalies ha salido de la vía a causa de un desprendimiento. Según ha explicado el conseller de Territori, Damià Calvet, en esta zona ya se habían aplicado medidas que restringían la velocidad entre el 2015 y el 2017 debido a los taludes y se colocaron unas rejas para evitar posibles desprendimientos. La reducción de velocidad dejó de aplicarse al considerar que el espacio ya contaba con las medidas de seguridad pertinentes.

"La vía estaba en perfecto estado", ha asegurado Isaías Táboas, presidente de Renfe, que se ha desplazado hasta el polideportivo de Vacarisses, donde se ha habilitado una zona para atender a familiares y conocidos de las víctimas. Según Táboas, el tramo donde se ha producido el accidente había sido objeto de varias actuaciones "muy recientes" de refuerzo de los taludes y operarios de Adif habían comprobado visualmente la situación de la trinchera este mismo lunes.

Precisamente, fuentes de Adif han confirmado que sí que se había inspeccionado la zona a raíz del aviso de un conductor, que denunciaba el pasado jueves que las fuertes lluvias eran especialmente patentes en este tramo y que podría haber alguna afectación en la vía. Al día siguiente del anuncio del operario, se revisó el lugar donde este martes se ha producio el desprendimiento y se comprobó que la zona no había sufrido daños de gravedad.

La presidenta de Adif, Isabel Pardo, ha asegurado desde Vacarisses que en las inspecciones recientes realizadas en la zona -viernes pasado y este lunes- no se apreciaron anomalías. Con respecto a las causas del accidente, Pardo ha anunciado que se ha abierto una investigación para aclarar los hechos y ha apuntado que se trataba de un talud centenario, motivo por el cual este punto del trayecto entre Terrassa y Manresa estaba sometido a un plan de vigilancia especial del cual "habrá que evaluar el cumplimiento".

La actuación más reciente realizada en este tramo fecha del 2017 y consistió en tareas de contención, con una intervención en la trinchera de la parte alta del talud, con una malla con anclajes y una valla para sostener posibles desprendimientos. Sin embargo, Pardo ha insistido en que se verificará ahora si las actuaciones realizadas "fueron las perceptivas".

Descarrilamiento Vacarisses Tren

A estas alturas sólo quedan en observación dos heridos, entre ellos el conductor del tren accidentado, que se encuentra estable a pesar de haber recibido un golpe muy fuerte en el brazo. El otro afectado que todavía se encuentra en un centro hospitalario es uno de los pasajeros de los primeros vagones.

Según el jefe de la dotación de Bomberos de la Generalitat que ha dirigido el operativo de rescate, Eduard Martínez, cuando han llegado al lugar de los hechos, algunos de los pasajeros ya habían podido salir por su propio pie. "Las condiciones ambientales del momento han dificultado la intervención", explicaba, refiriéndose sobre todo a la poca iluminación y a la niebla, que complicaba las actuaciones para evacuar a los heridos que todavía estaban atrapados dentro de los vagones accidentados.

Descarrilamiento Vacarisses Tren

El balance definitivo del accidente es de 133 personas afectadas: una víctima mortal, cinco personas heridas menos grave trasladadas por el SEM y 44 pasajeros leves.

El descarrilamiento de este martes es el tercero en esta zona desde el 2009. En marzo de aquel año un tren con 42 pasajeros descarriló a la estación de Vacarisses-Torreblanca y causó once heridos leves, entre ellos el maquinista. Además, en enero del año 2011 otro tren salió de la vía por un desprendimiento, en aquella ocasión sin causar heridos.

Adif procederá en las próximas horas a retirar primero todas las piedras y la tierra que ha caído sobre las vías como consecuencia del desprendimiento y después a desmontar la catenaria. Una vez efectuados estos dos pasos, se desplazará al lugar un tren taller para retirar el convoy accidentado y se evaluarán "los daños en la vía".