La princesa de Gales, más conocido como Lady Di, siempre será recordada por su elegancia y su pasión por el arte y la moda, así como la lucha por las injusticias sociales. Este 31 de agosto hará 28 años que murió en un recordado accidente en un túnel de París. Sin embargo, su figura sigue despertando interés. En 1989, Lady Di fue elegida presidenta de honor del hospital infantil Great Ormond Street, en Londres, y en 1991, enterró una cápsula del tiempo con 10 objetos escogidos por ella misma en este hospital, acompañada por dos pequeños pacientes. Este miércoles, con motivo de la remodelación del hospital y la apertura de un nuevo Centro Oncológico Infantil, la urna ha sido desenterrada por el personal del hospital que trabajaba en el hospital en 1991 y por nacidos en esta fecha. Aunque la idea inicial era abrirla 100 años después, el proyecto de construcción ha provocado el adelanto de su apertura.

¿Qué hay en la cápsula del tiempo de Ladi Di?
El tesoro que hace 34 años guardó a Lady Di estaba lleno de objetos representativos de la década de los 90 que escogió junto con dos niños que ganaron un concurso por eso. En el interior de la caja de madera, revestida de plomo, está el CD de Rhythm of Love de Kylie Minogue, un cómic, un ejemplar del diario británico The Times. Sylvia Foulkes, una de las pacientes, que tenía 9 años, escogió incluir un holograma de un copo de nieve, una calculadora solar, monedas británicas y cinco semillas de árbol de Kew Gardens. Mientras que David Watson, de 11 años en aquel momento, fue quien escogió el CD, una hoja de papel reciclado, un pasaporte europeo y una televisión portátil. Además, la caja también tenía una fotografía de la misma Diana.

El paso del tiempo ha dejado su huella|, ya que el hospital descubrió que actualmente no tienen ningún reproductor capaz de leer el CD del artista. Janet Holmes, una trabajadora del hospital que estuvo presente en el acto de colocar la primera piedra ha afirmado que "me ha traído muchísimos recuerdos ver el televisor de bolsillo que había allí. Le compré uno a mi marido en su momento, para cuándo se tomaba un descanso mientras conducía su autobús por el país. ¡Eran carísimos entonces"!