Los laboratorios Hipra trabajan con la estrategia que la vacuna catalana sirva como dosis de recuerdo. Con planta en Amer y después de recibir la autorización de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS), el director de la división de Salud Humana de la compañía, Toni Maneu, ha explicado a Efe que ha tenido en cuenta que tenga esta "utilidad" de acuerdo con la situación de España y el conjunto del entorno europeo. El proceso de vacunación avanza y ya se contemplan dosis de refuerzo o de recordatorio.

De esta manera, la vacuna Hipra, conocida como PHH-1V, se podría adaptar a "gente que ha recibido otras dosis o que ha pasado el coronavirus", ha explicado Maneu. Sin embargo, la intención es también que la inmunización completa forme parte del ensayo para mercados de fuera de Europa que la requieran.

Las fases

Después de recibir la autorización este miércoles, está previsto que el lunes se seleccionen los voluntarios en los hospitales Trueta de Girona y el Clínic de Barcelona. Según recoge Efe, está previsto que dentro de un mes y medio, aproximadamente, acabe esta fase y empiece la siguiente, donde participarán también otros centros sanitarios de España. También es posible que participen centros de Italia y de Portugal.

El objetivo es llegar a la comercialización de la vacuna el primer trimestre del 2022. Esto, sin embargo, dentro del escenario más positivo. En otro más realista, según el propio Maneu, podría ser que no llegara hasta el segundo.

Eficacia contra las variantes

Tal como resalta Efe, Maneu ha destacado que con la información actual, la PHH-1V ha demostrado "efectividad con todas las variedades, incluida la variante delta", que es una de las que más preocupa actualmente y que tiene un claro vínculo con la quinta ola que sufre Catalunya.

Hoy por hoy, están "muy contentos" de los resultados obtenidos hasta ahora, aunque también existe "un nivel muy alto de responsabilidad, porque ahora se empezará a vacunar a humanos". Por ahora, están convencidos de tener "una buena vacuna", pero con todas "las miradas puestas encima".

Dos proteínas recombinantes

La vacuna, según Europa Press, está basada en dos proteínas recombinantes estructuralmente similares, una correspondiente a la variante alfa y otra correspondiente a la variante beta, que se unen formando una estructura única llamada dímero, y que se acompañan de un adyuvante que incrementa la respuesta inmunológica. Esta combinación es capaz de generar una respuesta inmunológica delante de una de las proteínas del virus SARS-CoV-2, conocida como proteína S (de spike, también denominada proteína de pico).

Esta plataforma es la misma que se ha utilizado para las vacunas de Novavax y Sanofi/GSK, que ya están en proceso de evaluación para su potencial autorización por parte de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés). Pero a diferencia de ellas, la vacuna catalana expresa proteínas de dos variantes diferentes.

En el estudio se dividirá a los voluntarios en grupos (cohortes) y se empezará administrando la dosis más baja a la primera cohorte. Después de la evaluación por parte de un comité independiente de vigilancia de los datos de seguridad de estos participantes, se irán escalando a las dosis siguientes si no se han detectado problemas de seguridad. Sanidad explica que esta práctica, "habitual en este tipo de ensayos", está orientada a evaluar la dosis óptima de vacuna. Cada participante recibirá dos inmunizaciones separadas por 21 días.

 

Imagen principal: Un miembro del personal sanitario se prepara para administrar una dosis de la vacuna / Efe