El conseller de Interior, Miquel Sàmper, ha alertado de que el próximo lunes se revisarán las medidas restrictivas para frenar la pandemia de la Covid-19, justo después de las fiestas de Navidad. En este sentido, ha alertado de que si los datos empeoran, se podrían endurecer.
"No sé si se flexibilizarán, se quedarán igual o se endurecerán", ha indicado Sàmper en una entrevista a RAC1. Ahora bien, ha advertido que los datos no invitan al optimismo. "Catalunya está mal. No vive un momento dulce", ha remarcado el conseller.
Un mosso d'esquadra en un control en el Ripollès, una comarca que permanece perimetralmente confinada desde el pasado martes / ACN
Miedo a la Navidad
De hecho, en las puertas de las celebraciones navideñas, que empiezan esta noche, el número de nuevos contagios roza los 3.000, según los últimos datos facilitados este lunes por el Departament de Salut.
Por eso, el conseller ha manifestado que tiene "miedo" sobre cómo la gente pueda actuar durante los días de esta festividad. En este sentido, ha destacado que desde el Govern se han implementado varias medidas, pero que si no se siguen, se puede disparar la curva de contagios. "En los Estados Unidos el día de Acción de Gracias, el equivalente a nuestra Navidad, la curva de nuevos contagios subió en vertical", ha asegurado Sàmper.
En el caso de Catalunya se limitan las reuniones de los días de Navidad a diez personas y de solo dos grupos burbuja. Además, permanece el toque de queda, que empieza a las diez de la noche, pero que en el caso de la Nochebuena y de Fin de Año se ampliará hasta la una de la madrugada. "Celebremos la Navidad con el calor, dentro de tres o cuatro meses", ha señalado Sàmper.
Restauración
Sàmper ha explicado que en otros países como Alemania, Francia o el Reino Unido se han aplicado, prácticamente, confinamientos totales, pero que en Catalunya se están implementando medidas para conjugar la salud y la saturación del sistema sanitario con la economía y el desgaste emocional de la población de muchos meses de pandemia. Pese a ello, ha matizado que hay sectores, como la restauración, que se han visto gravemente perjudicados por la crisis económica que ha desatado la pandemia de la Covid.
De hecho, ayer hubo quejas del sector en la Cerdanya y el Ripollès, dos comarcas que se han confinado por el incremento de casos. Además, los restauradores del resto de Catalunya también se han quejado de las restricciones que se les ha impuesto, ya que solo se les permite abrir de 07:30 a 09:30 y de 13:30 en 15:30.
En este sentido, se ha mostrado "empático" con el sector a la vez que ha afirmado que no es "justo" que paguen todos los impuestos si solo facturan el 30% o menos con las nuevas limitaciones. Además, ha recordado que, a raíz de la crisis económica, algunos ayuntamientos han optado por que no paguen los impuestos municipales. En este sentido, ha considerado que desde el Govern de la Generalitat se tendría que estudiar una reducción de los impuestos a la restauración mientras dure la pandemia.