El director de los Mossos d'Esquadra, Pere Ferrer, ha constatado este domingo que el toque de queda se cumple en general y que hay una minoría que se resiste, sobre todo jóvenes en grupos pequeños. En este sentido, ha explicado al 3/24 que se han impuesto ya más de 200 sanciones desde el viernes por la noche.

Ferrer también ha apuntado que esta pasada noche ha habido un 70% menos de movilidad en comparación con el mismo día de hace dos años. "A la 1 quedan las calles vacías y sólo quedan grupos pequeños. La mayor parte de la ciudadanía cumple", ha resumido. Sobre los botellones, que ya estaban prohibidos antes del toque de queda, el director de los Mossos ha argumentado que se trata de un modelo de ocio y turístico que no sólo corresponde a él abordar.

Ferrer ha negado pasividad de los Mossos y ha reiterado el balance "satisfactorio" del primer fin de semana con toque de queda, recordando que la pandemia ya dura un año y medio y "la fatiga es un elemento no menor" entre la ciudadanía.

La situación en las UCI

La directora del Servei Català de la Salut (CatSalut), Gemma Craywinckel, ha asegurado este domingo que el pico de esta quinta ola en las UCI podría llegar a los 400 o 500 pacientes a finales de julio. En una entrevista en Rac1, Craywinckel ha dicho que los centros están ahora compatibilizando actividad covid con otras patologías, con el problema añadido que muchos profesionales empiezan vacaciones. Por eso, ha remarcado que es un momento "muy complicado".

En este contexto, ha explicado, ya hay dificultades en los hospitales por mantener actividad programada. La responsable del CatSalut ha dicho que hay un problema "gravísimo" de manos y no ha descartado activar sanitarios de vacaciones aunque es "la última opción" y "casi una línea roja". "Si la situación lo demanda los profesionales sanitarios tienen esta primera misión, que es ayudar y atender la población", ha dicho.

Contagios y toque de queda

Según Craywinckel, buena parte de los contagios se están produciendo en la calle, en grandes fiestas, salidas, viajes de fin de curso o fiestas de graduación, entre otros. "Hay mucha interacción social", ha asegurado. La directora del CatSalut se ha mostrado preocupada por este hecho porque cree que el miedo a la realidad de contagiarse no ha calado entre los jóvenes.

"En estos momentos tenemos un volumen relevante de pacientes en las UCI por debajo de los 40 y tenemos casos de olas previas de gente joven con covid persistente", ha remarcado en Rac1.

Sobre el toque de queda, ha indicado que se tendría que mantener hasta que la incidencia sea más baja. "No nos tendríamos que permitir una incidencia acumulada por encima de los 250 y vivir con normalidad", ha añadido. El criterio del toque de queda, ha apuntado, es rebajar la incidencia y que haya una tendencia. Como mínimo, ha augurado, se alargará tres semanas.

Craywinckel ha reconocido que la reapertura no fue lo bastante lenta como tendría que haber sido y ha reconocido el error. Desde el punto de vista del CatSalut, además, cree que se ha reaccionado tarde a los contagios y lamenta que los "tempos" no fueran los mismos que para la desescalada. El toque de queda aprobado, ha afirmado, estaba puesto encima de la mesa desde el 4 de julio.

 

Foto principal: Un grupo de jóvenes en la playa se saltan el toque de queda / ACN