El gobierno británico pondrá en libertad a 4.000 presos de centros penitenciarios de Inglaterra y Gales para contener la propagación del coronavirus, que ya ha dejado casi 5.000 muertes y contagiado 50.000 personas en el país.

Según ha informado al ministerio de Justicia inglés este domingo, los internos con permiso de salida son todos de bajo riesgo y les quedan menos de dos meses para cumplir condena. Todos ellos serán vigilados con sistemas de geolocalización electrónicos para identificar su posición.

El ministro de Justicia, Robert Buckland, lo ha calificado de "medida sin precedentes", ya que "el coronavirus se apodera de nuestras prisiones, el sistema sanitario británico podría acabar desbordado".

En el reino Unido, cerca de 90 presos y 15 funcionarios de prisión han dado positivo por coronavirus, y hasta 1.200 internos se quedan en sus celdas para no contagiarse.

Irlanda de Norte también se ha sumado a la iniciativa y pondrá en libertad en 200 de los 1.500 presos que mantiene en sus prisiones.