Un estudio publicado en la revista The Lancet HIV confirma la cura del virus que causa el sida del conocido como el 'paciente de Londres': 29 meses después de someterse a un trasplante de células madre no se ha detectado ninguna replicación del virus en su organismo. La publicación, en la que ha participado IrsiCaixa - Instituto de Investigación del Sida, sale a la luz coincidiendo con la conferencia mundial más importante sobre la enfermedad, la Conference of Retrovirus and Opportunistic Infections (CROI). En el mismo congreso, el consorcio IciStem presenta un tercer caso de remisión a largo plazo del VIH después de un trasplante de muelle de hueso, el 'paciente de Dusseldorf', que lleva 14 meses sin el virus en ausencia de medicación antirretroviral.

Los dos casos se integran dentro del consorcio internacional IciStem, coordinado por el Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa, impulsado conjuntamente por el Departamento de Salud y La Caixa, y el University Medical Center d'Utrecht (Holanda). El congreso tenía que tener lugar en Boston, pero finalmente se celebra de forma virtual a causa del coronavirus.

Los investigadores diferencian los conceptos de 'cura' y 'remisión a largo plazo' en función del tiempo transcurrido sin rebote viral desde la interrupción de la medicación antirretroviral. "Cuando se publicó inicialmente el caso de Londres insistimos en no hablar de cura porque, aunque 18 meses invitaban mucho al optimismo porque no se había visto un intervalo tan largo desde del paciente de Berlín, queríamos ser prudentes y no generar falsas expectativas", explica Javier Martínez-Picado, investigador ICREA en IrsiCaixa y coordinador de IciStem. Ahora, con 29 meses de remisión, los investigadores van un paso más allá.

Restos de ADN viral sin capacidad infecciosa

El 'paciente de Londres' es un hombre que era portador del VIH en quien se le detectó un Linfoma de Hodgkin por el cual en el 2016 se tuvo que someter a un trasplante de células madre con una mutación, denominado CCR5 Delta 32, que impide la entrada del virus en las células diana del VIH. Al cabo de 16 meses, los médicos interrumpieron el tratamiento antirretroviral y, en marzo del 2019, la revista Nature publicó el artículo en que se demostraba que llevaba 18 meses con el virus indetectable en la sangre, lo cual lo convertía en el segundo caso de 'remisión a largo plazo'.

El estudio que se publica ahora en The Lancet HIV destaca que, 29 meses después de la interrupción del tratamiento, el virus continúa indetectable en sangre, líquido cerebro-espinal, semen y tejido intestinal. Los análisis han detectado niveles muy bajos de genoma de VIH en tejidos linfoides, pero se trata de material genético defectuoso que no tiene capacidad replicativa y, por lo tanto, tampoco tiene capacidad infecciosa. "Todo eso nos empuja a concluir que se trata de un segundo caso de curación porque en el 'paciente de Berlín' también se detectaban restos fósiles de ADN viral y sin capacidad infecciosa", explica Martínez-Picado.

El 'paciente de Londres' también presenta anticuerpos contra el VIH, a pesar de que en un nivel muy bajo y que ha experimentado una reducción continua desde la intervención. Su presencia podría indicar que las nuevas células del sistema inmunitario podrían haber sido expuestas en el virus, pero según la investigadora de IrsiCaixa Maria Salgado, que forma parte del consorcio IciStem, es "habitual que en el organismo persistan evidencias de una infección pasada, los anticuerpos pueden tardar años a desaparecer".

Tercer caso de remisión

El 'paciente de Dusseldorf' es un hombre de 50 años con infección por el VIH que, en febrero del 2013, recibió un trasplante de células madre para tratar una leucemia mieloide aguda. Las células del donante también tenían la mutación CCR5 Delta32. En noviembre del 2018, los médicos interrumpieron la medicación antirretroviral y, 14 meses después, continúa sin rebote viral. Los análisis muestran rastros de ADN del virus en los nódulos linfáticos y el trato gastrointestinal, todo y que sin capacidad infecciosa. Según los investigadores, estos resultados son "compatibles con una remisión sostenida del VIH". Es el tercer caso en el mundo.

Habitualmente, cuando las personas con infección por el VIH interrumpen el tratamiento, el virus rebota a lo largo de las primeras cuatro semanas. La falta de rebote en estos casos es porque las células del donante son resistentes al VIH y, en medida que van reemplazando las células del receptor después del trasplante, disminuyen las posibilidades de infección para el virus, que acaba desapareciendo.

A pesar del éxito, Martínez-Picado subraya que "todavía quedan ciertas barreras por derribar antes de que la edición genética del receptor CCR5 pueda ser utilizada como estrategia de cura escalable para toda la población".

Financiado por The Foundation for AIDS Research, amfAR (EE.UU.), IciStem ha incluido desde el año 2014 a 40 pacientes con VIH que se tenían que someter a un trasplante de células madre. Los investigadores subrayan que el trasplante es un procedimiento médico de riesgo elevado y sólo se aplica en pacientes que sufran una enfermedad que no pueda tratarse mediante otras terapias. También ponen el acento en que la retirada del tratamiento antirretroviral sólo puede hacerse por decisión médica.