Duro encontronazo entre el Síndic de Greuges, Rafel Ribó, y el unionismo en el pleno del Parlamento, a raíz de la presentación de su último informe sobre el 1-O. Ribó ha denunciado la violencia policial "desproporcionada" que hubo durante la jornada del referéndum y ha reprochado que se pudiera dialogar con ETA y no con el independentismo.

El unionismo, sin embargo, le ha reprochado que sólo represente el independentismo. "Es el Síndic del proceso", han criticado, acusandolo también de no criticar lo suficiente la ruptura de la legalidad del independentismo y de no haber denunciado la vulneración de los derechos de la oposición en el pleno del 6 y 7 de septiembre. En este sentido, lo han acusado de no cumplir con su papel de imparcialidad de ser el "Síndic de la mitad de los catalanes".

Se podía hablar con ETA y no con el independentismo

"Por qué hubo agresiones sobre gente pacífica que su única arma era una papeleta?". Así de contundente se ha mostrado Ribó en la presentación del informe sobre la violencia del 1-O y los hechos que lo rodean que ha elaborado su oficina, donde ha criticado que el gobierno español no haya querido abrir un diálogo con los políticos independentistas cuando sí que lo hizo con ETA.

Ribó también ha criticado el encarcelamientos de los líderes del proceso y se ha preguntado si "alguien puede suscribir que las manifestaciones del 11-S eran actos criminales?". Además, el Síndic también ha criticado la actitud del gobierno español y la aplicación "desproporcionada" del 155, con la que ha defendido que no se podría haber cesado un Govern ni disuelto el Parlament.

El PP le pide la dimisión

El más crítico con Ribó ha sido el diputado de Ciudadanos Carlos Carrizosa que lo ha acusado de utilizar de manera "vergonzosa" las instituciones catalanas y no ser crítico con la Declaración Unilateral de Independencia, que considera que ha "fracturado" la sociedad catalana. En un tono muy burlesco, Carrizosa ha tachado Ribó de ser "el Síndic del proceso" y de representar sólo a la mitad de los catalanes.

El diputado del PP Santi Rodríguez se ha expresado de una manera muy parecida y se ha referido a Ribó como el "Síndic del universo independentista". Por este motivo, el popular ha pedido la dimisión de Ribó.

Además, tanto Cs como PP le han reprochado que su número dos en la oficina de la sindicatura hubiera sido Jordi Sànchez y que dos meses después de dejar el cargo, saliera escogido como presidente del ANC. Ribó se ha mostrado visiblemente molesto por estos reproches y ha criticado que hablen de una persona que está encarcelada y que no se puede defender personalmente.

"Lo que más dolor me ha hecho es que Cs citara a Jordi Sànchez, que está encarcelado injustamente", ha defendido.

Rafel Ribó Síndic - Rafel Ribó

Finalmente, la diputada del PSC, Assumpta Escarp, también ha criticado el último informe de Ribó, aunque lo ha hecho con de una manera mucho más pausada. Para Escarp, el informe no es lo bastante crítico con la "ruptura de la legalidad" por parte del independentismo y le ha lanzado un "querría sentir que el Síndic es también mi Síndic". Sin embargo, Escarp, a diferencia de Cs, ha criticado también la "desproporcionalidad" de la violencia policial del 1-O.

Por el contrario, Joan Josep Nuet, en nombre de Catalunya en Comú, ha reprochado al unionismo la crítica encarnizada a Ribó, porque asegura que a veces les gusta lo que denuncia y lo utilizan para atacar el Govern, pero que en cambio cuando no les gusta lo que les dice lo critican. En este sentido, ha defendido su trabajo y ha calificado sus informes de rigurosos.

Los independentistas hacen un homenaje al 1-O

La presentación del informe del Síndic sobre el 1-O ha servido a los partidos independentistas para hacer un homenaje a la "victoria colectiva" que defienden que fue el referéndum, pero también han querido denunciar la represión de los cuerpos policiales del Estado.

En este sentido, el diputado de JxCat Antoni Morral ha asegurado que el 1-O fue un "anhelo y un deseo de democracia" y un "camino de esperanza que marcó un antes y un después". También ha asegurado que el 1-O ganó la democracia y que "eso no se nos perdona". Morral también ha denunciado que el Estado enloqueció para detener el referéndum y ha denunciado un "déficit democrático del estado español".

Por parte de ERC ha intervenido la diputada Adriana Delgado que ha criticado la "desproporcionalidad" de la violencia policial del 1-O, que ha tildado de "vergüenza", y ha hecho un homenaje a la "actitud de los ciudadanos que salieron a votar a pesar de las amenazas y el miedo". "El 1-O será un día que durará años", ha defendido.

Para acabar, el diputado de la CUP Vidal Aragonés ha calificado la actuación policial del 1-O como un "castigo colectivo indiscriminado" y ha denunciado que ha habido una "respuesta represiva a derechos fundamentales" que "ha roto el derecho de expresión y reunión".