El presidente en el exilio, Carles Puigdemont, ha querido recordar los cuatro años de la Operación a Judas exigiendo "la amnistía total" y "el fin de la represión". "Por muchas puertas que revienten, no podrán con nuestras convicciones", ha dicho el presidente a través de su cuenta de Twitter. Puigdemont ha querido recordar las acusaciones de terrorismo contra 9 miembros del Comité de Defensa de la República (CDR). Siete de los detenidos fueron encarcelados en la prisión de Soto del Real. A estas alturas, todos ellos esperan un juicio. "Cuatro años después de la Operación Judas, la única respuesta que esperamos del Estado español es el fin de la represión y la amnistía total", ha afirmado Puigdemont, recordando el caso que cayó nada más cuando se estaba celebrando el juicio del Procés.

Una investigación polémica

Justo hace cuatro años, unos 500 agentes de la Guardia Civil, bajo las órdenes del Juzgado de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, se desplegaron coordinadamente por varias ciudades: Sabadell, Cerdanyola del Vallès, Santa Perpètua de Mogoda, Mollet del Vallès, Sant Fost de Campsentelles, Sant Pere de Torelló y Gurb. Realizaron 10 cacheos en domicilios locales y la fiscalía tildó los investigados de "grupo terrorista de carácter secesionista", bajo acusaciones de terrorismo, rebelión y tenencia de explosivos.

Los abogados de los acusados denunciaron desde un primer momento varias regularidades durante el proceso de detención y la instrucción. Algunos registros se habían hecho sin el abogado del defensor presente, algunos de los acusados no se les dejó dormir durante más de 24 horas, se les había interrogado ininterrumpidamente durante más de 6 horas y sometidos a coacciones y amenazas. Además, también habían denunciado filtraciones a la prensa española. Además, algunas de las filtraciones detallaban un plan de cierre indefinido del Parlamento de Catalunya con la connivencia del presidente Torra.

Los represaliados de la Operación Judas estarían dentro de los casos de una posible amnistía

Los afectados para la Operación Judas está dentro de del 'Mapa de la represión' de Òmnium Cultural, que tendrían que ser amnistiados por el Gobierno. Según detalló el presidente de la entidad independentista, Xavier Antich, como mínimo, 1.432 represaliados estarían dentro de esta lista de amnistiados, aunque la cifra inicial era de 4.400 personas. De hecho, el caso de que no está en esta lista es el de la presidenta de Junts, Laura Borràs, quien fue condenada a cuatro años y medio de prisión por|para irregularidades cuando era directriz de la Institución de las Letras Catalanas. En cambio, sí que está como víctima en el marco de la Operación Pegasus.

Y es que la amnistía es una de las condiciones de los partidos independentistas para investir al líder del PSOE, Pedro Sánchez. De hecho, el presidente en el exilio, Carles Puigdemont, la exigió antes de iniciar una negociación para la investidura. Es decir, habría que aprobarla antes de una investidura de Sánchez. El objetivo es el de negociar "con las mismas condiciones". En cambio, los republicanos aseguran que la amnistía ya se pactó en el marco de las negociaciones de la constitución de la Mesa del Congreso de los Diputados, hecho que socialistas niegan tajantemente.