El nuevo conseller de Presidència, Jordi Turull, tiene claro que el Estado está intentando dividir Junts pel Sí para debilitar el referéndum.

En una entrevista al 3/24, el conseller de Presidència ha explicado que no hay ninguna competición con ERC "para ver quién tiene más imputados" y ha aprovechado para recordar que el PDeCAT tiene un fuerte compromiso con el referéndum, quitando importancia al hecho de que los tres consellers cesados son de la formación demócrata. "Tenemos condenados por dar voz a la gente", ha apuntado Turull, recordando las figuras de Artur Mas y Francesc Homs, ambos inhabilitados por el 9-N.

Crítica a los comuns

Turull se ha mostrado disgustado con el posicionamiento de Catalunya en Comú. Y es que el conseller de Presidència no acaba de entender por qué el partido de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no dé apoyo al referéndum después de haberse reivindicado como una formación favorable al derecho a decidir. "Me sorprende la reacción de los comuns, conozco gente que los ha votado y se pone las manos en la cabeza", ha comentado Turull sobre lo que considera un posicionamiento alejado de la realidad: "No pueden hacer la revolución con el permiso del Estado porque no pasará", ha sentenciado.

Con todo, Turull ha lamentado que los comuns hayan traicionado el espíritu del "legado" que los precede, como el del Partit Socialista Unificat de Catalunya, que ha reivindicado como referente del catalanismo de izquierdas.

El papel de los Mossos

El recién nombrado conseller ha comentado también la posible intervención de los Mossos d'Esquadra por parte del Gobierno, en aplicación de la ley de Seguridad Ciudadana. Turull ha asegurado que, contra lo que se plantea en este escenario, los Mossos harán exactamente lo mismo que en cualquier otra cita en las urnas: "garantizar la seguridad".

En todo caso, Turull ha querido alejar a los Mossos del papel que ha tenido la Guardia Civil en la judicialización del procés. El conseller no da crédito al hecho de que el pasado jueves, el cuerpo policial irrumpiera en el Teatre Nacional de Catalunya con el objetivo de buscar documentación sobre el acto del referéndum organizado por Junts pel Sí. "¿Cómo puede ir la Guardia Civil a pedir información sobre un acto político?", se ha preguntado Turull visiblemente indignado.

Movimiento ciudadano

El nuevo portavoz del Govern ha recordado que la fortaleza del proceso radica en una ciudadanía que, según Turull, ya no está atemorizada por las acciones del Gobierno. "El Estado tiene que saber que el 9-N la gente ya perdió el miedo". Con estas palabras, Turull se ha mostrado convencido de que el referéndum del 1 de octubre será posible y, es más, ha considerado que la población se implicará e irá a votar.

Turull ha insistido en la importancia de la sociedad civil en la culminación del procés. "La gente nos ha llevado donde estamos. Ellos intentarán por la vía judicial el discurso del miedo", ha explicado el nuevo titular de Presidència sobre los posibles embates del Estado de cara el referéndum del 1 de octubre. "En octubre se podrá votar y votará mucha gente", ha apuntado Turull que ahora ve en el gobierno de Rajoy un reconocimiento del conflicto. "Primero dicen que no votaremos y ahora que el referéndum no irá bien".

Alaba a Munté

Turull ha hablado también de su predecesora, Neus Munté, que considera más una amiga que una compañera de partido. Ha destacado su papel hasta ahora al frente de Presidència y como portavoz del ejecutivo. "Me gustaría al menos llegar a hacerlo tan bien como Neus Munté", ha subrayado.

Con todo, Turull ha asegurado que irá "a por todas" con el referéndum en su nuevo cargo: "No tengo miedo de inhabilitaciones ni de que me quiten patrimonio".