El peligro de prisión continúa. La sala de apelaciones del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha aceptado parcialmente el recurso presentado por la defensa de William Aitken, el joven escocés condenado a 5 años y 1 mes de prisión para participar en una protesta por el rapero Pablo Hasél en Barcelona en el 2021. El TSJC retira las agravantes de usar un instrumento peligroso -la Audiencia de Barcelona dijo que usó su monopatín para romper el suelo-, y de lanzamientos peligrosos, pero le mantiene la pena de 2 años y 9 meses de prisión por los delitos de desórdenes públicos y atentado contra la autoridad, hecho que lo pone en peligro de entrar en la prisión. Aitken ya estuvo 36 días en prisión preventiva, y ahora su abogado, David Aranda, presentará ahora un recurso de casación en el Supremo para evitar que vuelva. Alerta Solidaria ha denunciado, este lunes, que "ha sufrido todo tipo de obstáculos burocráticos" y que "su no será contabilizado en ninguna amnistía".

En la resolución, el tribunal del TSJC -formado por las magistradas Àngels Vivas, M. Jesús Manzano y Roser Bach, como ponente- consideran probado, a través del testimonio de distintos agentes de los Mossos, de Esquadra, que el joven escocés tiró objetos a los furgones policiales, en el tercer día de las protestas contra el encarcelamiento del rapero, el 17 de febrero de 2021, entre la rambla de Catalunya y la Gran Vía de les Corts Catalanes. Movió contenedores y tiró piedras contra las furgonetas policiales, y después lo detuvieron. No obstante, el tribunal no acepta que pusiera en peligro las personas concentradas ni que el monopatín de madera que llevaba pueda ser considerado una arma peligrosa. Tampoco acepta el recurso de la Fiscalía que pedía que se lo condenara por la agravante de disfraz. El TSJC sí que mantiene la agravante de haber actuado, aprovechando una manifestación.

El tribunal, imparcial

Además, el TSJC no acepta el argumento del abogado del joven que el magistrado presidente en el juicio perdió su imparcialidad al valorar y hacer preguntas a los agentes. Fue “una simple apreciación” no se puede considerar “un signo incriminatorio”, manifiesta el tribunal cuando el juez usó el adjetivo “indiscriminado”.

 

Con esta sentencia, Alerta Solidaria ha denunciado que "a pesar del sobrado arraigo" de William en Barcelona, donde vive desde hace más de cinco años, pasó 37 días en prisión preventiva, con el argumento del juez que al entrar en vigor el Brexit ya no era ciudadano comunitario. Precisa que "todos estos años no ha podido volver a Glasgow" y "ha sufrido todo tipo de trabas burocráticas en el trabajo, con los bancos, por tener el pasaporte retenido en los juzgados". Con todo, la organización de la izquierda independentista sostiene que su abogado presentará recurso "a pesar de que en cualquier momento podrá ser gritado para entrar en la prisión".