"Preservar la convivencia y no causar un daño mayor al que se pretende evitar". Estas eran las órdenes judiciales para encarar la jornada del referéndum del 1-O, órdenes que, después que el Mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, advirtiera al coordinador del dispositivo policial español, Diego Pérez de los Cobos, que saldrían más de dos millones de personas a la calle y recordara que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) avisó que había que limitar el uso de la fuerza a "repeler agresiones evitando causar un daño mayor al que se quiere evitar".

Así lo recoge hoy Público, que saca a la luz el texto del acta que reproduce cómo Trapero acataba las órdenes judiciales delante del responsable de la coordinación del referéndum del Ministerio del Interior: "El Mayor del Cuerpo de los Mossos d'Esquadra pone de manifiesto que los cuerpos policiales tienen como misión cumplir la ley y las órdenes de las autoridades judiciales, y tienen que hacerlo conforme a los principios de actuación legalmente establecidos. En este sentido, insiste en que la previsión para el día 1 de octubre es que salgan a la calle más de dos millones de personas, por lo que considera que la forma como la policía tiene que llevar a cabo esta orden judicial es preservando la convivencia, como indica el propio auto judicial, y actuando con proporcionalidad y congruencia, haciendo uso de la fuerza únicamente cuando haga falta repeler agresiones a la policía o a terceras personas y evitando causar un daño mayor al que se pretende evitar".

Ahora bien, ante eso, De los Cobos, convencido de lo que tenía que hacer, soltaba que "lo que no es de recibo es utilizar como excusa la posible alteración de la convivencia que podría derivarse del hipotético uso de la fuerza en caso de resultar necesario para incumplir las órdenes judiciales recibidas y facilitar el desarrollo de una actividad ilegal mediante la inacción policial".

Con el único objetivo de impedir el referéndum, De los Cobos sostiene que "el principal bien a proteger es el cumplimiento de la legalidad y del mandato judicial recibido, y que no se puede confundir lo que es sustantivo con lo que es adjetivo: lo sustantivo es cumplir la ley y, en consecuencia, impedir la celebración de un acto que ha sido declarado ilegal tal y como lo ha decretado el juez; y lo adjetivo son las circunstancias que rodean la forma en que se tenga que hacer [...]. El objetivo es que se impida la votación; respetando el orden público, competencia del cuerpo de los Mossos d'Esquadra; pero el Estado, ante un posible incumplimiento por parte de estos, puede actuar utilizando las restantes fuerzas y cuerpos de seguridad".