El presidente de la Generalitat, Quim Torra, y el presidente en el exilio, Carles Puigdemont, han pedido "mediación internacional" en un artículo conjunto en la prestigiosa revista norteamericana 'Newsweek'. Bajo el título "Ha pasado un año y Catalunya todavía no es libre", los presidentes dicen que la "presión política y mediática" que ejercen PP y Cs "es difícil de resistir sin el apoyo y la mediación de la UE".
"Hace más de un año que los ciudadanos de Catalunya votaron en un referéndum de independencia. A pesar de los temores a la violencia y el abuso de la policía española, cerca de 2,3 millones de personas fueron a las urnas el 1 de octubre de 2017". Con estas palabras empiezan el artículo; los dos presidentes recuerdan que a pesar de la represión policial y las amenazas por parte del estado español, "el miedo no era tan fuerte como la voluntad colectiva de decidir nuestro propio futuro".
Puigdemont y Torra ponen de manifiesto que de aquí pocos días algunos dirigentes políticos catalanes ya hará un año que están encarcelados y recuerdan que su único delito ha sido "apoyar y organizar este referéndum". Como consecuencia, los dos presidentes se hacen una serie de preguntas: "¿Se puede tratar un referéndum como una rebelión en un estado miembro de la Unión Europea? ¿Los políticos pueden seguir en la prisión o en el exilio para ayudar a organizar un acontecimiento democrático? Por qué no se ha investigado la violencia policial excesiva en los tribunales españoles?".
Acto seguido, el presidente Puigdemont subraya que la decisión de exiliarse le ha permitido ver cómo funciona un sistema de justicia independiente como el de Schleswig-Holstein (Alemania), el de Bélgica o el de Suiza. A pesar de estar convencido de haber tomado una buena decisión, Puigdemont asegura que "el exilio es difícil".
Por otra parte, Torra y Puigdemont también denuncian que, después de la reacción de Bruselas a las cargas policiales del 1-O, "parece" que la UE acepta "el uso de la fuerza y la represión" como "herramienta legítima".
Finalmente, sobre la justicia española, dicen que "no tiene estándares europeos" y que los líderes independentistas sólo han podido ver "cómo funciona una justicia independiente" con los procesos de extradición qa Bélgica o Alemania.