El presidente Quim Torra ha criticado este viernes la mesa de diálogo entre los gobiernos central y catalán, que ha definido como "foto de conveniencias políticas", y ha apostado para impulsar un proceso de "secesión unilateral", a que "está permitido internacionalmente".

Torra ha participado en una mesa redonda titulada Transformación democrática de conflictos, dentro de las jornadas organizadas en San Sebastián por varios organismos internacionales y los colectivos vascos Foro Social Permanent y Bake Bidea para reflexionar en torno al décimo aniversario de la Declaración de Aiete, que precedió al fin del terrorismo de ETA.

Un acto con Ibarretxe

El presidente catalán, que ha intervenido desde Girona por videoconferencia, ha compartido debate con otros representantes independentistas vascos y catalanes: el exlehendakari Juan José Ibarretxe y los representantes de movimientos sociales Jordi Cuixart i Amalur Álvarez, portavoz de Gure Esku, asociación que promueve la autodeterminación de Euskadi.

Sin a duras penas alusiones a ETA y al cabo de diez años transcurridos desde que puso fin al terrorismo, el debate se ha centrado en las reivindicaciones independentistas de los cuatro ponentes, moderados por el diputado nacionalista escocés Stephen Gethins.

Sentencia sobre el Kosovo

El más explícito ha sido Quim Torra, que ha aludido a una sentencia del Tribunal de La Haya sobre Kosovo para justificar un proceso independentista unilateral, al argumentar que una secesión sin acuerdo "no es está prohibida".

"España no permitirá nunca ni reconocerá el derecho de autodeterminación de los pueblos, habrá que ir a una secesión unilateral, que está permitida internacionalmente, acompañada por un ejercicio de desobediencia," ha indicado el expresidente.

Brecha en un sistema político

En su opinión, sólo los "movimientos nacionales vasco y catalán" podrán causar una brecha en un sistema político que "es fruto de una reforma y no de una ruptura", lo cual permitió mantener en el Estado español "estructuras franquistas y fascistas".

Por su parte, Ibarretxe ha rememorado el intento de lanzar un proceso independentista acordado que fue el denominado "plan Ibarretxe", con el cual se consiguió, ha dicho, "elevar al campamento base el concepto de derecho a decidir".

"Lo intentamos y no lo conseguimos, no estoy para dar consejos a nadie", ha dicho el exlehendakari a los representantes catalanes, a quienes ha reconocido el "ejemplo de dignidad en términos políticos" que dieron al impulsar el procés.

"Habéis sufrido una vulneración de derechos humanos individuales y colectivos de libro, no por las ideas que tenéis, sino por haber querido desarrollarlas de forma democrática", ha añadido Ibarretxe.

Cuixart habla de la sociedad civil

El presidente de Omnium Cultural, Jordi Cuixart, ha subrayado el papel de la sociedad civil en el proceso independentista catalán, que se trató de llevar a cabo "a pesar de los partidos políticos"

Ha abogado para no "rebajar las expectativas" que llevaron a los nacionalistas catalanes a ejercer "uno de los mayores actos de desobediencia civil" desarrollados en "toda Europa", en alusión al referéndum del 1 de octubre de 2017.

Cuixart ha aludido a la Conferencia de Aiete, de la cual se puede extraer la enseñanza que "no puede haber vetos" en un proceso de este tipo y que resulta necesaria la implicación de la comunidad internacional, que "más rápido que tarde" tendrá que implicarse también en el conflicto de Catalunya.

 

El exlehendakari Juan José Ibarretxe; el presidente Quim Torra; el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Ciuxart; la portavoz de Gure Esku Dago, Amalur Álvarez; y el miembro del Partido Nacionalista Escocés, Stephen Gethi / EFE