La declaración y los datos del aparcamiento Glorieta Paz han revelado que la periodista Maribel Vilaplana acompañó con su vehículo al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, hasta las proximidades del Palau el 29 de octubre de 2024, el día de la trágica DANA que sacudió el País Valencià. El registro del ticket, pagado a las 19:47 horas, confirma la hora de salida del garaje y contradice las versiones mantenidas hasta ahora por Presidencia.

Según fuentes del PP consultadas por el diario Levante, Mazón bajó del coche en las cercanías de la sede presidencial sobre las 20.00 horas y entró solo. En el interior, un asesor externo le informó de la gravedad de lo que ya estaba ocurriendo en varios municipios de l'Horta Sud. Poco después, el president se dirigió hacia el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat en l'Eliana, donde las imágenes oficiales le sitúan entrando a las 20.28 horas, mientras el ES-Alert sonaba en los teléfonos a las 20.11 y el barranco de Poio ya se había desbordado. La nueva información choca frontalmente con las dos versiones difundidas desde Presidencia. La primera situaba la llegada alrededor de las 17.00 y la segunda, que hablaba de cerca de las 19.00. Los datos del parking coinciden, en cambio, con los publicados por Levante-EMV, que apuntan a una entrada al Palau en torno a las 20.00 horas.

Una comida larga y un trayecto clave

El presidente y la periodista habían comido juntos desde las 15:00 horas en el restaurante El Ventorro. El propietario del establecimiento declaró a la jueza que la comida se alargó hasta entre las 18:30 y las 19:00, una franja coincidente con lo que Vilaplana manifestó en sede judicial: “Más o menos sobre las 18:45”. 

Según declaró ante el juzgado el propietario del local, Alfredo Romero, la comida se celebró en un reservado situado en el primer piso, con capacidad para cinco personas. Se sirvió un menú cerrado que incluía una botella de vino, una caña inicial y varias botellas de agua. La comida concluyó a las 17:00, aunque Mazón y Vilaplana alargaron la sobremesa hasta las 18:45, momento en el que abandonaron el restaurante.

Después de la comida Mazón acompañó a Vilaplana hasta la entrada del parking de la plaza de Tetuán. Según la narración de la periodista en el juzgado, estuvieron “un rato” hablando y ella bajó sola hasta el coche. Permaneció entre cinco y quince minutos utilizando el móvil y el ordenador, pagó a las 19.47 y salió. Vilaplana declaró ante la jueza Nuria Ruiz Tobarra que “entra sola” al aparcamiento y “que cuando se despiden en el parking, no sabe hacia qué dirección se dirigió Mazón”. Ella bajó y ya está, según la transcripción de la declaración judicial. Sin embargo, fuentes consultadas por el medio valenciano confirman que el presidente finalizó el trayecto hasta un punto cercano al Palau dentro del vehículo de Vilaplana.

Un vacío de 37 minutos en el teléfono del presidente

El periodo comprendido entre la salida del restaurante y la del parking coincide con la desconexión telefónica del presidente, ya que desde las 18.57 hasta las 19.34 no realizó ni recibió ninguna llamada. Son 37 minutos sin actividad que se enmarcan justo antes de que la periodista abandonara el parking.